Ante la temporada de tormentas tropicales y huracanes que generan un impacto en Hidalgo, el peligro de mayor magnitud en materia de inundaciones es un posible desbordamiento del Río Tula, informó en entrevista para Notivox el director general de la Comisión Estatal de Agua y Alcantarillado (CEAA), Juan Carlos Chávez González.

Por ello, apuntó el funcionario estatal, se desarrolla un monitoreo constante tanto en este cuerpo de agua como del Río Salado, afluentes que reflejan afectaciones ante fuertes precipitaciones atípicas, como se tuvieron en las últimas semanas, aunque al momento no se ha tenido un escenario de riesgo a la población.
Chávez González refirió a este medio que el riesgo no deriva directamente de las lluvias en la entidad, sino de los caudales del Estado de México (Edomex) y Ciudad de México (CDMX) que llegan al Río Tula, por lo cual se mantiene coordinación con ambas entidades para que en caso de un mayor afluente se toman las previsiones adecuadas.
“Ahorita monitoreamos el Río Tula y Río Salado, que pasa por Tezontepec de Aldama, porque tiene un problema en el puente de La Cruz, que pasa por Río Salado, y desde hace muchos años está invadida la zona federal. Además tiene una resistencia al caudal muy pequeña, no aguanta grandes afluentes y empieza a tener desbordamientos pequeños, pero si el Río Tula se desborda esto afecta a Tezontepec, por ello hacemos esta tarea permanente con la coordinación de Protección Civil (PC) y los municipios para que en su caso se cierre el puente”, afirmó.
El titular de la CEAA comentó a Notivox que el caudal del Río Salado es pequeño en su profundidad, además de que se encuentra lleno de piedras. Al ser un margen menor en la resistencia del caudal, si el afluente incrementa su fuerza y tamaño se desborda porque no tiene capacidad de aguantar mucho caudal ante las fuertes lluvias.
“Desde luego que el peligro de mayor magnitud es el Río Tula, tenemos identificados los puntos críticos a lo largo del afluente desde Tula hasta Ixmiquilpan. Por ello desde el año pasado se trabaja con la Federación y este año la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ejecutará proyectos en 11 sitios para poner protecciones con gaviones (estructuras formadas por mallas metálicas, generalmente de acero galvanizado o recubiertas con PVC, rellenas de piedras o rocas para construcción de muros de contención y protección de taludes) para garantizar la seguridad de la población”, comentó.
Mientras que para el próximo año, apuntó, se trabaja en el proyecto ejecutivo para ampliar el caudal del puente de La Cruz, en el Río Salado, y con ello tener mayor fluidez del agua en ese punto para evitar riesgos.
Deslaves en la Sierra Alta
Al igual que el Río Tula, añadió Chávez González, se tiene identificado como punto crítico, o de riesgo, por lluvias atípicas la Sierra Alta del estado, sobre todo la región de la Huasteca Hidalguense, por los deslaves que generan afectación en las carreteras, “sobre todo cuando entra un huracán o tormenta tropical y afecta más en la sierra cuando entran de lado del Golfo de México”.
Pese a que sí se han presentado precipitaciones fuertes en la región, reconoció el funcionario estatal, no se reflejan daños significativos que impidan las comunicaciones entre los municipios y comunidades de esta zona del norte de Hidalgo.
“En la sierra hemos tenido deslaves sobre carreteras, pero de manera no tan importantes son deslaves pequeños que se hacen, estos puntos tienen una gran cantidad de agua, está fluyendo mucha y favorecerá en algún momento; sin embargo, todo este paso del agua desgasta algunas cuencas hidrológicas se generan estos movimientos de tierra, aunque no de manera significativa sí es un peligro que está latente. Preferimos que sea lluvia constante de muchas horas de magnitud menor a que entre el huracán como 2024 que tuvimos desafortunadamente la entrada de varios huracanes y tormentas tropicales que generaron deslaves mayores y de forma recurrente”, sentenció.