Calles y avenidas del centro de Lerdo presentan un preocupante estado de insalubridad debido a escurrimientos de aguas negras que recorren la avenida Juárez y se extienden hasta la calle Juan Aldama, formando charcos pestilentes que representan un foco de infección y proliferación de mosquitos.
El panorama resulta aún más preocupante al considerar que esta problemática ocurre a tan solo tres cuadras de las oficinas del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Lerdo (SAPAL) y a media cuadra del almacén de Servicios Públicos Municipales, sin que hasta ahora se haya dado respuesta por parte de las autoridades.

Vecinos del sector señalaron que han realizado diversos reportes al SAPAL, pero no han obtenido atención ni se ha revisado el origen de la fuga, lo que ha derivado en malestar generalizado, ya que los escurrimientos abarcan una parte importante de la manzana.
Ante las altas temperaturas, la acumulación de aguas residuales ha favorecido la aparición de mosquitos y malos olores que impiden incluso mantener abiertas las ventanas de las viviendas.
edaa