Después de 15 años, los familiares de Benito, pueden descansar y darle una cristiana sepultara, luego de que sus restos fueran identificados gracias a las pruebas de ADN que brindaron al Centro Regional de Identificación Humana (CRIH) de Durango.
El taxista originario de El Barro, comunidad de Gómez Palacio, desapareció en septiembre de 2010, pero en ese entonces su familia estaba temerosa y no presentó a tiempo una denuncia ante la Fiscalía General del Estado de Durango (FGED).
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Aunque en 2011 los restos fueron ubicados en un paraje de Parras, Coahuila, no fue hasta abril de este 2025, que se pudo hacer la identificación de los restos, pues sus cercanos desconocían el proceso.
Fue gracias al colectivo Madres Buscadoras de Durango que se logró una labor de convencimiento para poder lograr las muestras genéticas de los hermanos y mamá de Benito.
La prueba de identificación coincidió con unos restos que estaban bajo resguardo desde 2011 y los cuales habían sido encontrados en un paraje de Parras, Coahuila.
Sus seres queridos llegaron a pensar que Benito había decidido irse de la comunidad, después supieron que unas personas se lo llevaron y había quienes les decían que lo habían visto en otras ciudades, mantenían viva la esperanza de encontrarlo con vida.
Con esta identificación una familia logra dar por terminada su búsqueda; sin embargo, siempre tendrán la incógnita sobre qué fue lo que pasó.
Restituyen restos
El pasado 22 de abril, en Gómez Palacio, se llevó a cabo el proceso de restitución de restos de una persona desaparecida en el 2010 a sus familiares.
Los restos óseos fueron localizados desde el 2011 en un operativo de búsqueda generalizado en Parras De La Fuente, Coahuila. Posteriormente, su identificación se realizó a través de la Especialidad de Genética Forense por el Centro Regional de Identificación Humana (CRIH) Coahuila.
“Se realizó una notificación y entrega digna con el Grupo Interdisciplinario en donde toda la familia pues tuvo conocimiento de todo el contexto, del hallazgo, se les explicó y se hizo la restitución de los restos de su familiar”, explicó Claudia Liliana Calvo Quinteros, titular de la Unidad Especializada en Búsqueda de Personas de la Fiscalía General del Estado de Durango (FGE).
Entre los datos emitidos por Calvo Quintero, es que los restos corresponden a un varón de 23 años al momento de su desaparición, hechos que se suscitaron en un contexto de violencia.
“Afortunadamente, se logró localizar restos que permitieron lograr esa identificación y que la familia supiera la suerte de su familiar”.
Por el momento, la investigación continúa por parte del estado de Coahuila, y con la finalidad de no afectar el proceso, algunos detalles se reservaron.
Claudia Liliana Calvo, dijo que anteriormente ya habían llevado a cabo otra restitución de restos con respecto a las exhumaciones que realizaron en noviembre del 2023 en el Panteón de Gómez Palacio.
“Se logró la identificación de una persona, pero en este caso era originaria de Coahuila, entonces a través de fiscalías y comisiones de ambos estados se realizaron estos trabajos, se logró esa identificación y la restitución a sus familiares”.
Ante los resultados sobre la identificación de personas desaparecidas, la titular de la Unidad Especializada en Búsqueda de Personas de la FGE, resaltó la importancia de la toma de muestras de ADN, sobre todo de quienes tienen a un familiar sin localizar.
DAED
