El cuerpo del normalista de Ayotzinapa, Julio César Mondragón Fontes, será exhumado hoy para que siete integrantes del Equipo Argentino de Antropología Forense le realicen nuevos estudios, informaron familiares del estudiante.
Militares hallaron muerto a Mondragón Fontes el 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, tras los ataques que dejaron seis muertos y 43 normalistas desaparecidos.
Familiares del normalista informaron que en la exhumación también participarán casi 30 peritos y funcionarios públicos; sin embargo, dijeron, "confiamos plenamente" en los peritos argentinos.
A través de un comunicado, exigieron "a todas las instituciones del Estado no entorpecer ni obstaculizar el trabajo del EAAF".
La exhumación de Julio César, agregan, no fue iniciativa de la Procuraduría General de la República ni de ninguna otra instancia oficial, "es un logro de la lucha de la familia Mondragón y de todas las personas que la han apoyado".
Recordaron que el cuerpo de Julio César fue encontrado por militares el 27 de septiembre de 2014. "Ellos fueron quienes dieron el aviso al Ministerio Público en Iguala, Guerrero, e incluso estuvieron presentes durante la diligencia de levantamiento de cadáver. La autopsia realizada en Iguala se hizo sin profesionalismo ni rigor alguno, concluye que el rostro de julio fue arrancado por fauna del lugar".
Indicaron que la investigación llevada a cabo por la entonces Procuraduría de Guerrero (hoy Fiscalía) "está llena de errores, omisiones y carencias, lo cual sido documentado por el Grupo de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (GIEI)".
Los familiares del normalista dijeron que desde que ocurrió la tragedia en Iguala, "nos sumamos a la lucha por justicia pero fue a partir de marzo de 2015 que emprendimos una decidida lucha legal para esclarecer lo sucedido a Julio y que se finquen responsabilidades. Este camino de defensa legal ha estado lleno de obstáculos y contratiempos".
En mayo de 2015 la representación legal de la familia Mondragón obtuvo, luego de varias trabas burocráticas, el expediente del caso.
"Ahí se maneja la versión de que el rostro de Julio fue devorado por "fauna del lugar". El 26 de febrero la PGR anunció con bombo y platillo la detención del supuesto homicida de Julio, un asesino solitario. Con ello pretendía dar carpetazo al asunto, dar la impresión ante la opinión pública de que el asunto estaba resuelto. Sin embargo, al presunto responsable lo exoneraron por ese cargo un mes después", indicaron.
El 27 de agosto 2015 se solicitó formalmente la exhumación de Julio César Mondragón Fontes. Los familiares reconocieron que fue una decisión "dolorosa y difícil, pero indispensable para conocer la verdad".
"Desde entonces, con ese objetivo, se han realizado decenas de diligencias en las ciudades de Iguala, Toluca, Tecomatlán y el Distrito Federal. La Justicia tampoco ha sido pronta ni expedita en este caso. El común denominador de todo este proceso legal ha sido la dilación, la indolencia e inacción de las y los operadores de justicia que tienen en sus manos el fragmentado expediente", indicaron.
La familia aclaró en el comunicado que Julio era un normalista y no un joven desollado.
"Lo decimos de nuevo: Julio no es el joven desollado. Es el estudiante normalista, el trabajador incansable, el esposo cariñoso, el padre comprometido, el hijo alegre, el sobrino fortachón, el amigo rebelde, el nieto brillante y el hermano cómplice", dijeron.
Anunciaron que el próximo 7 de noviembre a las 2 de la tarde realizarán una marcha que partirá de la Plaza de las Tres Culturas hacia la Coordinación General de Servicios Periciales de la PGR.
