Luego de varias semanas de mantenerse en campamento a un costado de las instalaciones de la Casa del Migrante de Saltillo, decenas de personas levantaron sus improvisados aposentos para retirarse del lugar, ante el ultimátum que se les había dado de aplicar el reglamento municipal y proceder a su desalojo.
Alberto Xicoténcatl, Director del organismo, aclaró que no había ninguna autoridad en el lugar y no todos los migrantes levantaron su campamento, agregó también que existe espacio en la casa, pero no se puede obligar a las personas a ingresar, ya que la reglamentación que se sigue es muy específica, principalmente en estos momentos de pandemia por el covid-19.
Alrededor de 25 migrantes abandonaron y levantaron sus campamentos, con el propósito según algunos de ellos, de no entorpecer el paso de la caravana centroamericana que ya inició camino hace algunos días hacia Estados Unidos y que ha tratado de ser contenida tanto por los países de salida como de paso de la misma.
Los migrantes aclararon ante medios de comunicación que esperaban no ser motivo para que se tuviera un enfrentamiento con la autoridad, por lo que optaron por abandonar el sitio antes de cualquier otra cosa.
La Casa del Migrante ha cerrado parcialmente en tres ocasiones debido a la pandemia, la última ocasión por que se registraron 6 casos de personas enfermas de y una familia con niños, por lo que la Jurisdicción Sanitaria número 8 recomendó cerrar las puertas por 23 días.
El pasado 23 de diciembre se anunció que el Gobierno de Coahuila abriría un albergue temporal pero posteriormente se determinó que se daría asistencia a las personas enfermas, con lo que se logró que las puertas se volvieran a abrir el pasado 31 de diciembre.
En ese momento ingresaron 45 personas que debieron pasar por un filtro sanitario estricto, pero también hubo algunos que se negaron a ingresar debido a que quienes entran deben permanecer en resguardo por razones de seguridad y no salir hasta que sea también de manera permanente.
EGO