Su fuerza aun no le permite enterrar más a fondo la varilla en la tierra, pero no se da por vencido hasta alcanzar más de 50 centímetros de fondo en la laja. Después de 15 intentos logra enterrar el punzón y con ayuda de otra persona, la saca para olerla varias veces, a ver si encuentra algún indicio de restos humanos.
Es la historia de Brandon, un adolescente, que, a sus 15 años, aprendió las habilidades básicas de búsqueda de restos humanos, al integrarse al colectivo Unidos Por Amor A Ti.

El adolescente, que no titubea en su trabajo a pesar de su corta edad, busca a Jesús Mercedes Hernández, su padre, quien desapareció hace 10 años en Coatzacoalcos, Veracruz.
“Decido buscarlo, porque la verdad me quitaron algo valioso, alguien que era importante para mí, desde hace un año entré al colectivo Unidos Por Amor A Ti, con el deseo de encontrarlo”, expresa.
Después de una hora de búsqueda, abraza a su abuela y le dice que no se darán por vencido hasta encontrar su padre, “vivo o muerto, pero lo encontraremos”.
La desaparición de Jesús Mercedes
Brandon es de tez clara y complexión delgada, su abuela dice que tiene el físico de Jesús, su padre. Toma un descanso, respira, después de excavar y decide platicar con MIENIO su historia; recuerda poco, pero trata de ser claro en sus declaraciones, algo que sorprende a su edad.

Tenía cinco años, cuando Jesús desapareció, y lo que sabe, es que su padre trabajaba en un bar que se ubica sobre la avenida Juan Osorio López, frente a la central camionera de Coatzacoalcos.
“Hasta donde yo sé, el fue a trabajar ese día (el 25 de septiembre del 2015), y se que le hablaron para que saliera del bar, y unas personas se lo llevaron con rumbo desconocido, mi abuela y sus hermanos lo buscaron, pero nunca nadie supo a donde fue, ni quien se lo llevó”, relata.
Describe a su papá, como un hombre de familia que siempre trabajó por darles lo mejor, y recuerda que le gustaba jugar con él, “recuerdo que siempre que podía me cargaba”, comenta.
En 2015, hubieron más de 50 desapariciones forzadas en la ciudad de las grandes avenidas, con la implementación del operativo “Blindaje Coatzacoalcos”; la mayoría, sino es que todos, fueron privados de la libertad por elementos de seguridad pública estatal, algunos de ellos procesados por el delito de desaparición forzada.
La mayoría de desapariciones ocurrió el 25 de septiembre del 2015, mientras gobernaba Javier Duarte de Ochoa y su secretario de seguridad pública era Arturo Bermúdez Zurita.
Sin embargo, hay registros y denuncias ante la Fiscalía General del Estado (FGE) de otras desapariciones registradas en semanas siguientes, como el caso de Jesús, cuanto tenía 33 años.

La búsqueda
Tras varios días de no saber nada de Jesús, la señora Juana Hernández decidió buscarlo por cuenta propia, pero después de algunas semanas no sabía qué hacer.
En su búsqueda conoció a Oscar Ramírez, representantes del colectivo Unidos por Amor a Ti, y a gracias a este grupo logró interponer la denuncia correspondiente; también comenzó con las manifestaciones, diligencias y jornadas de búsqueda en lotes baldíos.
Pero los años pasaron y las fuerzas de la señora de 68 años comenzaron a disminuir.
Al ver el sufrimiento de su abuela, y con más edad y fuerza, Brandon decidió combinar sus estudios con las diligencias, manifestaciones y búsquedas en terrenos y lotes baldíos, por lo que pidió a Oscar, que lo dejara integrarse al colectivo. En un principio lo dudaron, por ser menor de edad, pero su tenacidad, le hizo ver que estaba decido a buscar a su padre.
“Es una triste historia porque él dice que cambió las canicas por una pala, una varilla para buscar a su papá, porque vio la necesidad de su abuela de buscar a su hijo y él tiene la necesidad de buscar a su padre; es de pensarle, pero nosotros lo cuidamos y le enseñamos lo poco o mucho que hemos aprendido con los años que llevamos buscando”, dice el representante del colectivo Unidos por Amor a Ti.
Brandon no se despega de su abuela, y cuando no puede más, la ayuda a sentarse para que descanse y el sigue buscando indicios de restos humanos.
“Nos integramos al colectivo hace varios años, pero desde el año pasado Brandon ha andado conmigo a buscar en todos lados. Es triste para los dos, porque no sabemos nada de su padres, nosotros no buscamos culpables, yo lo busco a él, lo necesito y sus hijos lo necesitan”, dice Juana llorando.
Fiscalía reactivó carpeta de investigación, pero no hay avances en las investigaciones
Después de una década, no existe una sola línea de investigación que confirme como ocurrió la desaparición de Jesús, aunque su madre y su hijo están seguros de que fue privado de la libertad.

Durante más de dos años, la carpeta de investigación estuvo detenida en la fiscalía, pero por presión del colectivo se activó.
“Aunque se activó, no hay nada todavía, venimos con la nueva comisionada que ya está tomando cartas en el asunto, ya se comunicó el titular de asesor jurídico, porque nunca hubo un acompañamiento, ni seguimiento en base a la investigación de ella; es lamentable que a 10 años no se sepa nada, ni si quiera una pista, y claro que hay muchos vicios en la carpeta de investigación”, dice Oscar.
Brandon no dejara de buscar a su papá
Tras concluir la diligencia de búsqueda, Brandon y su abuela se trasladaron a la plaza de la Paz, sobre el malecón costero de Coatzacoalcos, donde se sumaron a una manifestación para recordar a los desaparecidos en esta ciudad.
Al finalizar, abuela y nieto se abrazan mientras Juana le exclama lo siguiente a Brandon:
“Por favor, no me dejen sola, hay días que no puedo, no tengo fuerzas, pero tenemos que encontrar a tu papá, perdóname hijo por no poder hacer más y encontrarlo”.

Brandon toma fuerzas de su interior y comienza a gritar consignas, pues no pierde la esperanza de encontrar a su papá. Por ello, toma los guantes, la pala, los machetes y no deja de excavar.
“Quiero decirle a mi papá que lo vamos a encontrar, porque lo necesito, lo necesitamos aquí”, finaliza el adolescente.