El abrazo bilateral entre las ciudades hermanas de Reynosa, Tamaulipas, e Hidalgo, Texas, es toda una tradición. En este evento, los alcaldes y sus comitivas se encuentran a mitad del puente internacional, se dan el tradicional abrazo e intercambian regalos para después cruzar a México, donde se lleva a cabo una verbena popular en la plaza principal de Reynosa.
En esta ocasión, por primera vez en 49 años, la celebración de este importante evento se realizó en el Valle de Texas y no en Reynosa, como es costumbre. Esto se debió a la alerta de seguridad emitida por el gobierno de los Estados Unidos para sus ciudadanos, además de la tensa situación generada por la crisis arancelaria, según señalaron algunos asistentes.
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El alcalde de McAllen, Sergio Coronado, confirmó que este cambio de sede fue un mensaje para la población de ambos lados de la frontera ante la incertidumbre generada por la aplicación de los aranceles.
"Quiero recalcar que hoy hacemos historia. Por primera vez, en todos los abrazos, nuestros hermanos de Reynosa van a caminar hasta la ciudad de Hidalgo, Texas, reflejando que tenemos esperanza. Creo que podemos trabajar juntos como países. Esta situación de los aranceles es parte de la transición y esperamos que pronto se resuelva", expresó Sergio Coronado, alcalde de Hidalgo, Texas.
Asimismo, Coronado afirmó que, en el tema de las deportaciones, ellos no participarán en las redadas que se están llevando a cabo en otras ciudades de Estados Unidos.
"Debido a la situación que estamos viviendo en Estados Unidos, hablé con nuestro alcalde y consideramos que era una gran oportunidad para demostrarle al mundo que las puertas de nuestra ciudad están abiertas para todos. Sabemos que los inmigrantes están pasando por momentos difíciles con esta nueva retórica que viene de Washington, y nosotros alzamos la mano para decirles que en la ciudad de Hidalgo no habrá redadas por parte de la policía. Vamos a proteger a nuestra gente y queremos terminar con ese miedo", indicó el alcalde de Hidalgo.
El tema de los aranceles fue calificado por Coronado como una estrategia para alcanzar mejores acuerdos comerciales entre ambos países.
"Sí, claro que sí. Invito a la gente a que sea paciente. Como mencioné antes, este es un momento de transición política en Estados Unidos. En lo personal, creo que es una estrategia para llegar a ciertos acuerdos, y esperamos con optimismo que esta situación termine pronto", expresó el alcalde.
Al término del abrazo, se llevó a cabo una fiesta en la que se exhibieron las tradiciones culturales de ambas ciudades hermanas, enviando un mensaje claro: seguirán estrechando lazos de amistad en beneficio de sus ciudadanos.
EAS
