Hace una semana se lanzó Tropicoqueta, el quinto álbum de estudio de Karol G. La expectativa —por parte de fans y detractores— se dirigía hacia el mismo punto: el concepto del disco. La cantante colombiana ya había dado un adelanto en el sencillo “Si antes te hubiera conocido”, lanzado en junio de 2024 durante su gira “Mañana será bonito”, así como en “Latina Foreva”, a finales de mayo de este año, en donde se mantenía el reguetón como esencia de su sonido, pero ya anunciaba una marcada tendencia hacia la cultura latina.
Hasta que finalmente se confirmó el 20 de junio. La intérprete de “Provenza”, “200 copas” y “Amargura” desveló los 20 temas que conforman su nuevo disco, del que dijo en sus redes sociales: “Este álbum es alma, es pasión, memoria, es nostalgia, es alegría, es fiesta, es identidad”. Luego de una semana disponible en plataformas digitales, estas son algunas referencias claves del universo estético que se creó para Tropicoqueta.

Visuales inspirados en vedettes y telenovelas
En el primer video promocional del lanzamiento se ve a la artista colombiana en un set con fondo naranja en donde aparecen dos elementos: un sol y más atrás un par de palmeras. Es una referencia a una de las clásicas presentaciones de la bailarina y actriz puertorriqueña Iris Chacón.
En el video original, Chacón aparece vestida de rumbera interpretando el tema “El manisero”, del compositor cubano Moisés Simons. La bailarina se encuentra en un set en donde se aprecian las dos palmeras de fondo y una luna —contrario al caso del sol de Karol G, con el que busca contagiar la idea de verano—. En el caso de la puertorriqueña, la luna hace referencia a lo que se dice en la canción: “Caserita no te acuestes a dormir / sin comerte un cucurucho de maní / Cuando la calle sola está, acera de mí corazón / el manisero entona su pregón y si la niña oye su cantar grita desde su balcón”.
Congas, merengue, cumbia y mariachi
La portada de Tropicoqueta muestra a Karol G sobre tres congas, un instrumento cubano que ha definido el sonido de las orquestas de cumbia y salsa, así como el de las agrupaciones que interpretaban ritmos como el merengue, la rumba y el vallenato, entre otros. Estos géneros tuvieron un gran auge en las décadas de los 60 y 70, éxito que se mantuvo hasta los 80 y 90. El instrumento aparecía en casi todas las carátulas de la época.
El rojo vibrante de la portada también alude a la gama de colores utilizados en las imágenes de aquellos tiempos, que en conjunto con la tipografía conformaban los llamativos diseño de los discos de artistas de la época como La Sonora Matancera, Orquesta la Sabrosura, Tito Puente o Pérez Prado. También se puede percibir un ligero acercamiento a la famosa serie Cañonazos bailables, de la disquera colombiana Discos Fuentes, en la que cada diciembre se hacía una recopilación de temas variados que se convirtieron en un clásico para bailar en las fiestas de fin de año.

La figura femenina en la estética tropical
Tanto en el video de “Latina Foreva” como en las imágenes promocionales del disco, Karol G ha aparecido caracterizada como rumbera o vedette. La investigación para desarrollar el concepto fue realizado por Ficheraz, un archivo digital que preserva y divulga el legado de las vedettes de América Latina y el Caribe.
En el video del sencillo lanzado el 22 de mayo, la cantante colombiana luce un traje de los años 70 elaborado por el diseñador Mitzi, y que en su época usó la vedette mexicana Rosy Mendoza. El bikini forma parte de un acervo administrado por la hija de la actriz, luego de que esta falleciera en diciembre de 2023.
En el caso del set utilizado en la portada del quinto álbum de Karol G, el traje fue realizado por la marca guatemalteca Luna de Pinal, inspirado en la estética tropical de los espectáculos de cabaret y la figura de la mujer en esa época.
“Papasito”, una fiesta latina
El tercer track de Tropicoqueta, “Papasito”, es un technomerengue inspirado en la agrupación venezolana Los Melódicos. En el video, una vez más la intérprete aparece vestida con prendas de la época y en él transcurre una “fiesta latina”, según compartió Karol G en sus redes sociales. “Este video resume visualmente la magia, la alegría, la nostalgia, el amor, el color y la pasión de este álbum”, agregó.
Este festejo del que habla la colombiana se refiere a las reuniones de amigos y familiares que transcurrían escuchando temas tropicales, pero también recuerda a las apariciones de rumberas en las películas del cine de oro mexicano y el ambiente de las presentaciones en vivo en los famosos programas musicales que invadieron la televisión latina en esos tiempos.
Súper sábado sensacional, Sábado gigante, Siempre en domingo o El show de las estrellas —programa en el que Karol G debutó en la televisión colombiana— son algunos de los programas de entretenimiento en donde era común ver a diversas agrupaciones de música latina que se presentaban con un amplio despliegue de bailarines y en donde los sets eran ambientados con la temática del género que se interpretaba.
Nostalgia con el regreso de Cristina Saralegui
Lo que la cantante colombiana buscaba con este material discográfico era “volver a la raíz, a las canciones con las que crecí”. Y si algo se ve y se escucha como nostalgia es la voz de la periodista cubana Cristina Saralegui en El show de Cristina (otro de los icónicos programas que las familias latinas sintonizaban cada fin de semana).
El programa de televisión estadunidense se transmitió por Univisión de 1989 a 2010. Por él pasaron grandes exponentes mujeres de la música latina como Selena, Celia Cruz, Gloria Estefan, La India o Shakira.
Luego de 15 años fuera del aire, Cristina Saralegui reapareció con su famoso show para entrevistar a Karol G. La cantante colombiana contó en la entrevista que ser entrevistada por la periodista era uno de sus sueños: “Crecí viendo tus entrevistas, fueron una ventana para muchos artistas latinos en el mundo”.
La entrevista transcurrió en un set que, así como el universo de Tropicoqueta, fue un guiño a la nostalgia. Cristina Saralegui y Karol G mantuvieron una conversación durante casi una hora en donde se puede ver a la periodista con su característica forma de entrevistar en los años 90.
Tropicoqueta suena a fiesta, a las numerosas reuniones familiares, sí, pero también a los domingos tranquilos en la casa de los abuelos con ese sonido de fondo de los programas de entretenimiento o a la música que se escuchaba por las tardes en el modular de la sala.
El universo de Tropicoqueta crea la atmósfera ideal no solo para recordar esos sonidos de la infancia de quienes crecimos en los 80 y 90, también trae a la memoria todo ese archivo de imágenes que vimos a través de los gustos musicales de aquellos con quienes crecimos.
PCL