Actualmente, Juanes es uno de los músicos Latinos de mayor impacto a nivel mundial. Esto gracias a su carrera llena de éxitos musicales, como La Camisa Negra, A Dios le pido y Besos en guerra; a su distanciamiento de las polémicas; a sus colaboraciones con talentos como Joaquín Sabina, Juan Luis Guerra Nelly Furtado y Los Ángeles Azules; y a la reinvención sonora que muestra en cada disco, entre otros aspectos.
Aunque llegar al éxito ha implicado sacrificios y momentos no tan positivos para el colombiano, como el “colapso” que sufrió en 2010 y del que habló en una entrevista reciente con el youtuber Javier Paniagua.
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¿Cómo fue el colapso de Juanes en 2010?
En la charla para YouTube, Javier Paniagua le preguntó al músico colombiano: “¿Perdiste el piso en algún momento?”.
“Creo que sí, es casi inevitable porque uno no está preparado”, se sinceró Juanes.
Recordó que hace tiempo “me dio tres vueltas este mundo de la fama, los conciertos. Sobre todo, me empezó a generar una confusión horrible porque cuando sale La Camisa Negra”.
“Nunca se me va a olvidar cuando llego a Los Ángeles para mostrarle los demos de La vida… es un ratico a Gustavo (Santaolalla). Escuchamos los demos, las canciones y me dice ‘Vamos a dar una vuelta por el parque’”.
Ahí, en un ambiente tranquilo, el productor le preguntó: “¿Qué disco quieres hacer?”, a lo que Juanes “no sabía responder muy bien porque estaba confundido por todo lo que estaba pasando”.
A partir de ahí, la sensación de inestabilidad fue creciendo en él: “Sentí que estaba enloqueciendo, además pasaban los años y mis hijos crecían, yo no estaba en la casa, viajaba mucho”.
Hasta que “colapsé en el año 2010, dije ‘Ya me voy a morir, no puedo más’”. En ese entonces acababa de lanzar el disco P.A.R.C.E.
Sin estabilidad y con la presión por seguir haciendo música, Juanes sentía que “esto no es vida, no puedo vivir así, no me reconozco”.
Le dolía pensar que “algo por lo que yo luché toda mi vida, me estaba generando un rechazo tan tenaz, que era montarme en el escenario”.
Afortunadamente, con ayuda de sus familiares y amigos, el cantautor se pudo equilibrar. “Tuve que pasar por todo eso para aprender”, reflexionó.
“A veces uno en la juventud y la loquera uno piensa que no le va a pasar nada, pero sí le pasa”, zanjó el artista de 52 años.
hc
