Nacido en Monterrey, Nuevo León, el 19 de abril de 1983, el cantautor Elías Medina desde muy pequeño mostró inclinación por la música: a los siete años ya escribía canciones y a los 15 cantaba en bohemias y fiestas para costear sus estudios, lo que forjó su carácter y lo llevó a enamorarse de la música regional mexicana .

Su talento fue reconocido poco más tarde y una compañía discográfica apostó por él como compositor. Una primera canción grabada por Encuentro Norteño, desencadenó una larga lista de éxitos interpretados por artistas consagrados como Bronco, Pesado, Cardenales de Nuevo León, Grupo Firme, Leandro Ríos, Invasores de Nuevo León, Rieleros del Norte, Tatiana, Kudai, Susana Zabaleta y más, ganándose el apodo de “El nuevo clásico de la música mexicana”.
“En este punto de mi carrera, prácticamente me da tiempo solamente de escribir para mí —asegura—, pero en su momento perdí el celo de guardarme canciones, porque había necesidad de comer y cuando alguien me pedía una canción, yo feliz se la daba. Más allá de buscar una conexión, en ese tiempo buscaba sobresalir, progresar y pagar la renta”, recuerda el compositor.

Un camino propio
Además de escribir para otros, Elías ha incursionado como intérprete. Desde su álbum debut, titulado Niégame (2012), se ha definido como un artista honesto que regresa a los orígenes románticos del regional, con fusiones frescas de voz, acordeón, guitarra, batería y tuba.
“Pienso que a mi música la define la honestidad como compositor —comparte—. Hablo de una forma muy directa y con un lenguaje muy simple, algo que de repente se está perdiendo, pero lo simple no tiene por qué estar ligado con lo vulgar, así que yo prefiero enfocarme en el amor o el desamor; como cantante soy muy dado a mostrarme vulnerable, nunca estoy en la pose, solo busco mostrarme tal cual soy”.
De ahí que no haya incursionado nunca en otros géneros como los corridos tumbados o el narcocorrido.
“Es que no tengo en absoluto algo que me ligue a esos temas y tampoco tengo el gusto. Yo sé que hay autores que a lo mejor no están relacionados con ese mundo, pero les gusta fantasear, y a mí no, eso no se me da —dice tajante—. La canción tradicional popular puede hablar de mil cosas sin necesidad de caer en esos lares. No lo vimos con José Alfredo Jiménez, Juan Gabriel o El Buki, que son mis ídolos, y yo siempre he tratado de emular una carrera como la que hicieron ellos”.
Y agrega: “Yo respeto a quien escribe narcocorridos, entiendo que hoy en día está muy de moda y creo que, musicalmente hablando, hay cosas muy interesantes. Pero a mí lo único que me gusta disparar son besos”.
Claves
El Cantoral
Por primera vez se presentará en el auditorio de la SACM, los próximos 24 y 25 de octubre.
Reguetón
“Llegó para quedarse y es una muestra de cómo se ha transformado también la sociedad”, asegura.
De gira
Luego de presentarse en Monterrey y Guadalajara, visitará Colombia, Guatemala y Perú.