Verónica Soto asegura cuando le diagnosticaron cáncer de matriz y un embarazo, sí lloró pero sólo una noche, luego habló con Dios y afrontó lo que se venía.
Utilizamos cookies para darte la mejor experiencia de usuario y entrega de publicidad, entre otras cosas. Si continúas navegando el sitio, das tu consentimiento para utilizar dicha tecnología, según nuestra Política de cookies. Puedes cambiar la configuración en tu navegador cuando gustes.