Expertos médicos, convocados por el gobierno capitalino, consideraron que evitar el aumento de mayores contagios por covid-19 es una responsabilidad común de autoridades y comunidad, e insistieron en la necesidad de redoblar las medidas de higiene y cuidado ante la tercer ola de coronavirus.
En el foro “Medidas de prevención ante una nueva ola de covid-19”, organizado por la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (Sectei), el director general del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, (INCMNSZ), David Kershenobich, advirtió que es una responsabilidad compartida del sector médico y población la implementación de las medidas preventivas.
“Enfrentamos un incremento de casos por una mayor transmisibilidad de las variantes con características epidemiológicas distintas a las anteriores, frente a un número importante de la población que se encuentra vacunada, así como ante un cambio en la edad de la presentación de los casos. Es una responsabilidad compartida del sector médico y la población reconocer la importancia e implementación de las medidas preventivas. Lo que queda claro es que debemos cuidarnos”, dijo.
El investigador clínico de Pfizer, Rafael Valdez, señaló que el cubrebocas sigue siendo un instrumento de prevención elemental, ya que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció que debe ser utilizado en lugares concurridos, principalmente si no se puede estar al menos a un metro de distancia de los demás, y en habitaciones con ventilación deficiente o desconocida.
“Al hablar, emitimos una cantidad considerable de partículas que se aerosolizan. Cada partícula puede contener un número elevado de virus. Con el uso de una mascarilla, la dispersión de aerosoles no sólo disminuye en cantidad, sino en distancia alcanzada”, comentó.
El ex director de la Unidad temporal covid-19 Centro Citibanamex, reveló que hoy se cuenta con evidencia suficiente para recomendar, como política pública de prevención, el uso de cubrebocas. Por ejemplo, en Wuhan, China, de mil 282 personas que utilizaron mascarilla, solamente uno se infectó, versus 119 del grupo que no la utilizó.
Valdez explicó que, a pesar de la vacuna, el empleo de la mascarilla debe continuar, pues su uso es indispensable cuando las nuevas variantes lo han cambiado todo.
La doctora Diana Vilar Compte, del Departamento de Infectología del Instituto Nacional de Cancerología, señaló que los espacios ventilados son otra medida coadyuvante en la prevención de covid-19.
Al respecto, explicó que los virus respiratorios se transmiten esencialmente por tres mecanismos: gotas gruesas expulsadas por los contagiados al hablar o toser, las cuales terminan en ojos, nariz o boca del infectado; superficies contaminadas; y aerosoles, partículas diminutas, invisibles que exhala una persona enferma, y que quedan suspendidas en el aire.
“Sin ventilación, los aerosoles quedan en suspensión y se condensan en el espacio a medida que pasa el tiempo. El encontrarnos en lugares cerrados, sin ventilación, incrementa el riesgo de infectarnos. Si las personas están en silencio, no habrá partículas suspendidas en el aire hasta después de una hora; pero si hablamos, emitiremos diez veces más partículas respiratorias que estando callados”, señaló.
FS