María de Lourdes Pérez Gutiérrez, quien trabajaba como taxista en León, Guanajuato, desapareció el pasado 7 de diciembre menos de una hora después de iniciar su jornada, Familiares y amigos de la mujer de 52 años la buscaban y activaron una alerta para su búsqueda.
A través de un grupo de conductores y proveedores de servicios de transporte se informó de su desaparición, alertando que no se sabía de ella, ya que su servicio de emergencia UTR había sido desactivado. Compañeros de Lulú llamaron a su teléfono en varias ocasiones sin obtener respuesta.

El reporte indica que Lulú fue vista por última vez el 7 de diciembre, a bordo de un Aveo color plata, “se teme por su integridad y que sea víctima de un delito”, indicaba el comunicado; luego de que la familia hiciera una denuncia ante el Ministerio Público.
No obstante, el cuerpo de Pérez Gutiérrez fue hallado el pasado 22 de diciembre. De acuerdo con los reportes, Lulú fue asesinada y abandonada en un camino de terracería en León, además, presentaba “huellas de violencia”.
Ayer, familiares, amigos y también conductores de plataformas de taxi se despidieron de Lourdes en el panteón municipal Norte. Sin embargo, hicieron un llamado a respetar el duelo de los seres queridos de Lulú.
“Les pido que por favor tengan respeto para toda la familia. (…) No saben del sufrimiento ajeno y lo que la familia sentimos por la gran perdida que nos dejaron.
“Se ve que la persona que lo hizo no tiene sentimientos. Una gran tortura fue lo que sufrió. Sólo les pido que respeten el dolor y la perdida que estamos pasando. Que dios la tenga en su santa gloria y le dé el descanso eterno”, escribió una de sus sobrinas en redes sociales.
LP