Crisis económica mundial, desempleo, devaluación del peso, inflación, caída de los precios del petróleo, disminución del consumo, baja en los ingresos públicos y la parálisis derivada de las medidas sanitarias para intentar controlar el nuevo coronavirus Covid-19 son algunos de los elementos que llevan al especialista Julio Boltvinik a advertir que en México habrá un aumento en el número de pobres.
Basado en el Método Integral para la Medición de la Pobreza, Boltvinik señala que hay una subestimación del número de pobres por parte del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) ya que poco más de tres cuartas partes de la población nacional ya vive en la pobreza (76.7 por ciento) y que esta cifra va a aumentar dadas las circunstancias actuales.
"Aún no podemos saber de cuánto será el aumento", dice el profesor-investigador de El Colegio de México, porque depende de qué tanto se alarga la emergencia en el país por el Covid-19, pero prevé que además de las personas en pobreza, la clase media que depende de los servicios y el comercio; los que son microempresarios dueños de la papelería, de la fonda del barrio, verán afectado su poder adquisitivo.
Otro de los factores que preocupan a Boltvinik es el aumento de los precios de la canasta básica que comenzó a presentarse.
"Cuando suben los precios de los alimentos, la pobreza aumenta porque los más pobres dedican cerca del 50 por ciento de todo su ingreso a alimentos", advirtió.
Ayer, el gobierno federal declaró emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus Covid-19 y extendió hasta el 30 de abril la suspensión de actividades no esenciales para evitar contagios.
"Lo que hacemos al encerrarnos es dejar de consumir un montón de cosas, hasta la venta de gasolina va a caer porque mucha gente está trabajando en casa. Va a haber una crisis inevitable en las finanzas públicas por más que lo quiera esconder López Obrador, los ingresos del sector público se van a caer brutalmente", asegura el ex director del Proyecto Regional (Latinoamericano) para la Superación de la Pobreza, de Naciones Unidas.
Boltvinik atribuye esa caída a dos factores principalmente: el primero la caída de los precios del petróleo, que tocó mínimos históricos de casi dos décadas; y el descenso en la recaudación del IVA como el que se cobra por el consumo en restaurantes y el Impuesto Sobre la Renta (ISR)
"Los empresarios tendrán que tomar una decisión difícil: o le pago al fisco los impuestos o le pago a mis trabajadores".
Boltvinik señala que el adelanto de un bimestre de los subsidios a los adultos mayores por parte de la Secretaría del Bienestar es una medida correcta, pero que sólo servirá como un paliativo.
"Según la dependencia, los beneficiarios de los programas de pensión están recibiendo 5 mil 240 pesos de un golpe.
“Lo de adelantar pagos está muy bien, pero debería haber un programa emergente de pagos adicionales, pero obviamente ¿por qué no anuncian algo así?, porque saben que no les va a alcanzar ni siquiera para el programa como estaba establecido", concluye.