En las calles del centro de la ciudad abunda una gran cantidad de vendedores ambulantes y de personas que piden dinero a quienes transitan por ellas, en la mayoría de las esquinas se perciben puestos, carritos y personas ofreciendo algún tipo de producto.
Los locatarios de la zona comentaron que la llegada de estos vendedores les ha perjudicado en sus ventas pues al no pagar servicios, los ambulantes tienen la oportunidad de ofrecer productos en menor precio llamando la atención de los compradores.
“Ya está lleno aquí de ambulantes y lo peor es que ellos venden más que nosotros, el problema no es porque vendan, es porque ellos no tiene que pagar renta, ni agua, ni empleados pues obvio les queda más margen de ganancia, y a nosotros sí nos exigen todo eso, además de los permisos”, externó Gabriel Jiménez, locatario de zona Centro.
Respecto a quienes piden dinero, externaron que han visto que a algunos se les pide una cantidad para estar en la calle, y consideran que lo único en que los limosneros afectan es en la imagen del centro, pues se acercan a turistas y ciudadanos en restaurantes, cafés o cuando están sentados cerca del kiosco.
Los comerciantes comentaron que les gustaría que hubiera más supervisión por parte de las autoridades correspondientes para regular a estos vendedores y que las cosas fueran más justas para ambas partes.
“A mí se me hace que no es justo porque a uno le exigen muchas cosas y están al pendiente de los permisos y de los pagos y a ellos no les piden nada, les deben dar su mordida seguramente pero no es lo mismo y pues a lo mejor también por eso no los regulan porque les conviene recibir ese dinero, y los más perjudicados somos los locatarios”, externó un comerciante.
Indicaron que la cantidad de ambulantes ha aumentado en los últimos meses, creen que el número de vendedores sin permisos se elevó debido a la falta de autoridades que estén al pendiente de supervisar este tema.