La celebración de Los Fieles Difuntos es una expresión del amor que seguimos sintiendo por las personas y lo manifestamos con las oraciones, las flores y los altares que en estos días se preparan, dijo el obispo de esta diócesis, Gonzalo Alonso Calzada Guerrero, durante la homilía que dio a la feligresía que se concentró frente al panteón municipal.
Al tiempo que menciono que esta sea una oportunidad para los católicos de reafirmar la resurrección que es el punto central; la tradición de celebrar a los difuntos, esta ahí presente, lo que se debe tener es cuidado en no mezclarlo con otras costumbres y modas que vienen de fuera, “tenemos que mantener nuestras tradiciones que nos han identificado durante siglos, tenerlas vivas y que sigan ayudando en la identidad de nuestro pueblo".
El visitar la tumba, ponerles flores, elevar una oración por ellos, eso es lo que hoy les mueve a muchas personas, “la resurrección de Jesucristo es una obra de amor, es la respuesta del amor del Padre Celestial que así manifiesta el triunfo de un amor que no se mide, que no se limita porque no se detiene ante la muerte y nosotros somos nacidos de ese amor”.
Elevar una oración por los difuntos es importante porque lleva un doble sello , primero la caridad que mostramos hacia ellos y la certeza que tenemos de la victoria de Cristo, “nosotros amamos a nuestros difuntos, pero no con un amor nostálgico, prisionero del recuerdo, sino con el amor eficaz, propio del amor de Jesucristo Nuestro Señor”.
CHM