En un lapso de 100 años, en la región conformada por Puebla, Oaxaca y Morelos, se registraron cinco sismos de 6.5 grados o más, que dejaron múltiples inmuebles dañados y que se caracterizan por dejar un tiempo corto para que reaccione la población.
De acuerdo con un análisis del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), en los últimos 100 años, la región centro del país fue afectada por sismos similares: el sismo con epicentro en Acatlán de Osorio, Puebla, el 9 de febrero de 1928, magnitud 6.5; el sismo de Tehuacán del 11 de octubre de 1945, magnitud 6.5; el sismo de Huajuapan de León, Oaxaca, del 24 de mayo de 1959, magnitud 6.8; el sismo de Tehuacán del 15 de junio de 1999, magnitud 7; y el sismo 19 de septiembre de 2017, magnitud 7.1, con epicentro se localizó a 12 kilómetros al sureste de Axochiapan, Morelos, en los límites con Puebla.
El Cenapred detalló que entre 1928 y 1931, la zona de Oaxaca y Puebla se caracterizó fue por una serie de terremotos de magnitud considerable, la mayoría de los cuales son percibidos en la Ciudad de México y otras partes del país, siendo el movimiento con epicentro en Acatlán de Osorio, Puebla, del 9 de febrero de 1928, el más importante, ya que concentró más efectos.
“Siendo las 22:39:37 hora local, el 9 de febrero de 1928; nueve kilómetros al noreste de Acatlán de Osorio, Puebla, con una profundidad de 84 kilómetros y magnitud 6.5 (SSN, 2020) ocurrió el primer sismo de esta serie de eventos, el cual afectó principalmente a las poblaciones de los límites con Puebla y, sobre todo, a Huajuapan de León, Oaxaca, donde hubo daños importantes. Es percibido en la capital dónde periódicos de la época reportan numerosos derrumbes y daños estructurales, Veracruz y Guerrero”, revela el análisis.
Otro de los sismos más fuertes en la historia de Puebla y la región, se registró el 11 de octubre de 1945, a las 10:53 horas, con una magnitud de 6.5 y epicentro a 31 kilómetros al suroeste de Tehuacán, Puebla.
Por otra parte, hace 40 años, el viernes 24 de octubre de 1980, a las 8:53 horas, se registró un sismo de magnitud 7.1 sacudió la región limítrofe entre los estados de Oaxaca, Guerrero y Puebla.
“Causó alarma y daños considerables en poblaciones situadas en un radio de 100 kilómetros del epicentro. En la Ciudad de México, a 180 kilómetros del epicentro, se produjo alarma general, brotes de histeria y pánico colectivo ocasionados por el intenso movimiento y la interrupción en el suministro de energía eléctrica en prácticamente toda la ciudad”, revela el análisis.
El análisis del Cenapred revela que reportes oficiales consignaron más de 50 muertos, más de mil heridos y cerca de 15 mil damnificados distribuidos en seis ciudades y 60 poblaciones.
En Huajuapan, el 90 por ciento de las edificaciones sufrieron algún tipo de daño. Los más grandes se concentraron en viviendas, edificios de mala calidad y construcciones antiguas iglesias y presidencias municipales; mientras que con base en el reconocimiento visual se documentaron daños en Petlalcingo, Chila, Acatlán y Tulcingo en Puebla; en Huajuapan de León, Yosocuta, Tamazulapan y Tlaxiaco en Oaxaca; y Xochihuehuetlán, Huamuxtitlán y Tlapa en Guerrero. “Debido a lo accidentado de la topografía y al difícil acceso, en diversas comunidades no fue posible realizar una inspección”.
Por otra parte, el martes 15 de junio 15 de junio de 1999, a las 15:42 horas, se registró el sismo tuvo como epicentro la ciudad de Tehuacán, Puebla, con una magnitud de 7.1 grados y una duración de 45 segundos.
AFM