Monseñor Julio César Salcedo Aquino, líder de la Diócesis de Tlaxcala, dejará vacante su cargo en las próximas semanas para unirse al equipo de trabajo del Papa León XIV, convirtiéndose en único representante de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) en El Vaticano.
Así lo informó el CEM mediante un comunicado, en el que celebró la elección del todavía líder de la iglesia tlaxcalteca como miembro del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, con sede en Roma, Italia.

"Encomendamos a nuestro hermano en el Episcopado, Mons. Julio César, para que pueda cumplir con fidelidad y sabiduría la tarea que el Santo Padre le ha encomendado", destacaron el presidente del CEM, Ramón Castro Castro, obispo de Cuernavaca, y el secretario general, Héctor Pérez Villarreal, obispo auxiliar de México.
A ese pronunciamiento se sumó el vicario general de Tlaxcala, presbítero Raymundo Muñoz Paredes, quien encomendó la misión de monseñor Julio César Salcedo Aquino en El Vaticano a Nuestra Señora de Ocotlán, de los Santos Mártires Cristóbal, Antonio y Juan, y de San Miguel Arcángel, Patronos de la Diócesis.
"La noticia nos llena de alegría a los mexicanos, y especialmente a los tlaxcaltecas, y nos compromete a mostrarnos cercanos con el Santo Padre, el Papa León XIV y con Mons. Julio César, mediante nuestra oración y compromiso de seguir caminando juntos como Iglesia", expresó Muñoz.
Salcedo Aquino nació el 12 de abril de 1951 en la Ciudad de México y actualmente tiene 74 años. Pertenece a la Congregación de los Misioneros de San José y desde el 15 de julio de 2017, por instrucción de Francisco I (QEPD), asume como obispo de Tlaxcala, siendo el cuarto en la historia en regir dicha Diócesis.
La integración del monseñor al Vaticano obligará a que la Diócesis de Tlaxcala reciba a un nuevo obispo, el cual será elegido por el Papa León XIV.
AAC