Las lluvias y la granizada que se registraron la tarde noche del sábado generó diferentes estragos como inundaciones, autos varados y problemas en alcantarillas en la capital y zona metropolitana, así como en la autopista Puebla-Orizaba.
En Amozoc, municipio que limita con la ciudad de Puebla, se presentó una intensa granizada que desencadenó que diferentes campos de cultivo se pintaran de blanco; además, se registraron inundaciones y una barranca llegó a su máxima capacidad, lo cual, desencadenó problemas en algunas viviendas por la entrada de agua y lodo.
Por otra parte, en la capital del estado, la fuerte lluvia desencadenó que se botaran las alcantarillas en la Avenida Juárez, problema que ocasionó complicaciones en la circulación de vehículos.