Cuenta la leyenda que fue en el municipio de San Miguel de Allende que habitaba una mujer la cual sufría una deformación en su cara y siempre cubría su rostro con un velo negro.
Pero fue una noche que la mujer regresaba a su casa, cuando observó que algunos hombres borrachos la comenzaban a seguir, nerviosa y con paso apresurado, la mujer siguió su camino, cuando uno de los borrachos se acerco a ella para besarla, la mujer pareciendo temerosa se acercó a un poste que alumbraba la calle, cuando sintió que uno de los hombres estaba frente a ella, y la mujer comenzó a reír con terribles carcajadas y destapó su rostro deforme.
A los hombres les causó tal impacto ver su rostro y escuchar sus escalofriantes carcajadas que se quedaron pasmados de miedo recobrando el juicio, llevándose el susto de su vida comenzaron a huir del lugar en todas direcciones y desaparecieron en cuestión de segundos.
Desde ese entonces este rumor corrió por todo el pueblo y la “Tapada Misteriosa” se convirtió en leyenda.
Hoy se dice que se encuentra recorriendo la calle de Correo, donde espera a que salgan sus víctimas de la cantina.
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