Para evitar la violencia de género y detener los feminicidios en México se requieren de estrategias de prevención y educación, aseguró María Teresa Prieto Quezada, del Departamento de Políticas Públicas, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA), de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
“Lo que vivimos actualmente es un horror en cuanto al tema de la violencia hacia las mujeres, y tenemos que empezar a trabajar, detectar al problema, prevenirlo. A pesar de que es una violencia estructural podemos reeducar a la gente en el cuidado, la atención y la solidaridad al otro”, declaró la especialista, quien consideró que el problema de la violencia de género requiere una respuesta multireferencial por parte de las instituciones de gobierno y, en especial, de las que se dedican a la educación y la prevención.
“Este tipo de violencia es un monstruo de mil cabezas, en el que aparecen nuevas violencias a veces difíciles de describir en el sentido de que se requiere de la atención de muchos especialistas, criminólogos, psicólogos, sociólogos, porque no hay una respuesta clara hacia estas violencias tan crueles. Tenemos que estar atentos a estas nuevas formas que van apareciendo y que están deteriorando a nuestra sociedad. La alternativa es trabajar con niños y adolescentes en la prevención y la educación, que es fundamental para los cambios de actitudes y valores”, agregó Prieto Quezada.
Recientemente, Prieto Quezada fue aceptada en la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) en el área de Ciencias Sociales, así como Héctor Sevilla Godínez, especialista en filosofía y académico del CUValles, y María de la Luz Galván Ramírez, especialista en ciencias biomédicas e investigadora del Departamento de Fisiología del CUCS.
Y además
Investigadores en la AMCEl coordinador general académico de la UdeG, Carlos Iván Moreno, informó que suman 64 académicos de la casa de estudios en la AMC, lo que representa un 2 por ciento de la membresía de esta organización.
Consideró que la cifra es baja si se toma en cuenta que es la segunda universidad más grande del país, con más de mil 400 investigadores en el Sistema Nacional de Investigadores, del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), lo que representa un reto importante para aumentar el número de miembros.
SRN