El auto compacto que se usó para trasladar a la persona que fue privada de su libertad en el restaurante Los Otates se localizó abandonado a 800 metros del Hospital El Colli, donde dejaron muerto al presunto delincuente que participó en la balacera del pasado lunes, en la colonia Puerta de Hierro, al poniente de Zapopan.
Fueron elementos del Ejército Mexicano quienes localizaron el auto rojo con placas sobrepuestas que eran JRG8666 del Estado de Jalisco; estaba “debidamente estacionado” donde termina la avenida El Colli, a su cruce con Paseo de los Volcanes, en Moctezuma Poniente.
En su interior, peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) encontraron cubrebocas, ropa y tiros útiles para armas calibre .225 y 40. De acuerdo con una vecina, su hijo salió de casa alrededor de las ocho de la mañana y observó el auto, pero no le llamó la atención, porque esa parte de la calle suelen utilizarla como estacionamiento. El sitio estuvo resguardado por efectivos del Ejército y Guardia Nacional quienes solicitaron la presencia de la autoridad ministerial. Luego de fijarse indicios por parte de los peritos, el auto quedó asegurado y fue trasladado en grúa a la sede de la Fiscalía del Estado para que “se realicen los dictámenes periciales correspondientes”, confirmó la Fiscalía a través de un comunicado de prensa.
Este martes, se informó que de los tres lesionados que dejó la balacera, uno ya fue dado de alta, se trata de un mesero que resultó herido por esquirlas de bala. Mientras que el policía de Zapopan y el otro empleado se reportan estables.
La persona que falleció ya fue identificada oficialmente por sus familiares. Es vecino del municipio de Puerto Vallarta.
El restaurante Los Otates fue asegurado y también luce con dos sellos que advierten sobre la situación jurídica del inmueble. En una pared de la jardinera del establecimiento destaca un impacto de grueso calibre, así como manchas hemáticas en el piso de uno de los ingresos. Además, un vehículo quedó dentro y otro afuera, éste presentaba en uno de los costados huellas de choque.
De acuerdo con agentes investigadores, en el lugar se contabilizaron 100 casquillos de tres tipos de armas que se utilizaron en la refriega, 9mm, .223 y 40 milímetros.
A un día de la balacera, comerciantes, empleados y empresarios de la zona se dicen consternados por lo ocurrido, pero lo que más le llamó a atención a uno de ellos, fue la presencia de una mujer entre los hombres armados que privaron de la libertad al comensal, cuya identidad aún no ha sido revelada.
“Vestían ropa negra, chalecos tácticos, incluso venía una chica con ellos. Una chava que yo calculo que tiene entre 25 y 30 años de edad máximo. Era de pelo castaño claro”. ¿También estaba armada? “Todos traían rifles de alto calibre”, reveló uno de los testigos.
Otro dijo: “la mera verdad está bien complicada la zona, hay mucha gente rara. Esta como el de Ferrari, llegó y el del Ferrari andaba como loco aquí, preguntando, se pasaba los cordones, y los policías no decían nada. Está muy complicado esto”, respondió.
Por su parte, la Fiscalía del Estado informó que los operativos continuarán “con el objetivo de obtener datos de prueba que permitan no solo el esclarecimiento de los hechos, sino además dar con los responsables”.
Según expuso, hay información que “por su naturaleza no puede ser difundida para no alterar el debido proceso en la indagatoria”.
SRN
