El arribo de empresas coreanas a México siempre ha sido un imán para la creación de negocios. En Nuevo León, la llegada de Kia atrajo también a coreanos que vivían en otras partes del país y que migraron al estado para aprovechar las oportunidades que representaba la llegada de una armadora automotriz.
A cinco años del inicio de operaciones de Kia, hoy en el área metropolitana de Monterrey existen unos 25 restaurantes de comida coreana; muchos de estos exclusivamente para atender a esa comunidad y otros abiertos al público en general.
De esa avalancha de negocios que surgieron, un caso de éxito aprovechó la coyuntura de demanda de servicios y productos que se requirieron en su momento. Son coreano-regios que llegaron y residen en la ciudad.
Sujin Kim recordó que llegó como parte de la plantilla laboral de una de las empresas proveedoras de Kia. Nunca había estado en México, pero siempre le llamó la atención Latinoamérica, y en especial tenía un gusto por la cultura mexicana.
Tras un año y medio de laborar en la empresa proveedora de Kia, Sujin decidió renunciar y dedicarse a dar clases de coreano a los mexicanos.
“Llegué al Centro de Idiomas de la Unidad Mederos de la Universidad Autónoma de Nuevo León y ofrecí mis servicios. Armé el plan de estudios para enseñar coreano, y como había una euforia por lo coreano, me aceptaron, así inició mi etapa de maestra”.
Sujin Kim estimó que ha enseñado este idioma a unas 200 personas en tres años que lleva como maestra, y su plan de vida es continuar en la docencia, donde ha encontrado una gran satisfacción de ayudar a las personas a comunicarse y aprender otra cultura a través del idioma coreano.
Su actividad docente la combina con Tik Tok, su incursión se dio con la llegada de la pandemia de covid-19, que provocó una baja en las inscripciones de cursos de coreano. Hoy a casi un año tiene 8.5 millones de seguidores. _