La industria funeraria en México no cuenta con protocolos o regulaciones oficiales para saber cómo manipular de manera adecuada los cuerpos de personas que mueran a causa de una epidemia, como la del coronavirus, además de que reina la informalidad, lo que pone en riesgo tanto a los trabajadores del sector como a los familiares de las víctimas, advirtió el director general de la empresa funeraria J.García López, Manuel Ramírez.
En entrevista con MILENIO, lamentó que en nuestro país no existan reglas claras para el manejo de cadáveres de personas que eventualmente perderán la vida en la actual pandemia que se vive.
Dijo que apenas en fechas recientes se está buscando la unificación de criterios entre empresas funerarias y autoridades sanitarias.
“Es con la Secretaría de Salud con quien estamos normando un criterio. ¿Existe una norma como tal establecida del manejo de cadáveres? Por supuesto que existe, pero no contempla el manejo de una pandemia como ésta”, dijo.
Ramírez explicó que en el caso de la empresa que representa, existe un protocolo establecido de manera individual para el tratamiento de cuerpos con VIH, hepatitis o influenza, que en estos momentos está siendo reforzado para hacer frente a las muertes por Covid-19.
“No es nuevo, es algo que cotidianamente realizamos”, aseguró.
¿Cómo es el protocolo ante virus en funerarias?
Este protocolo consiste en desinfectar todas las áreas con las que un cuerpo infectado tiene contacto, desde el hospital hasta la sala de velación, y la protección total, con trajes especiales y desechables, de las personas que manipulan el cadáver para recogerlo, embalsamarlo y presentarlo en una sala de homenaje o velación.
“Éstos son esfuerzos, garantías que J. García López ponemos como buenas prácticas que llevamos a cabo en nuestra empresa y que la Secretaría de Salud tiene conocimiento de esto que estamos haciendo y trabajando en conjunto con ellos, para poder ofrecer un servicio que no ponga en riesgo a nadie”, aseguró Ramírez.
Comentó que en países como España, ante la crisis de coronavirus se han dictado medidas como no permitir los servicios funerarios.
“Están obligando a que sean cremaciones o sepultar directamente. El cuerpo se pone dentro de un ataúd. En España, se acostumbra cremar el cuerpo junto con los ataúdes de madera. La indicación de países como España es ésa, colocar el cuerpo en el ataúd, no llevar a cabo servicio funerario y directamente a la cremación o sepultarlo”, dijo.
Sin embargo, las medidas son adoptadas por cada país, pues “no hay una regulación de manera globalizada o que la Organización Mundial de la Salud haya dictado algún criterio”.
La empresa J. García López forma parte del Consejo Mexicano de Empresas de Servicios Funerarios (Comesef), el cual fue creado con la finalidad de unificar criterios en conjunto con las autoridades para poder regular a la industria funeraria, explicó Martínez, quien dijo que “desafortunadamente el gremio carece de seriedad o reina la informalidad en muchas circunstancias”.
Aseguró que en los servicios informales existe un riesgo de contagio debido a que éstos trasladan el cuerpo de un lugar a otro porque no cuentan con instalaciones propias y tercerizan los servicios: embalsaman en un lugar, velan en otro y creman en un sitio aparte.
bgpa