Mediante una narcomanta, integrantes de la célula criminal de "Los Aquiles" amenazaron de muerte a un comandante y a cuatro agentes de la Policía Ministerial de Baja California en Tijuana.
Los autores del mensaje acusaron a los agentes de robarse un cargamento de "cristal", cocaína y heroína, procedente de Sinaloa.
Al pie de la manta, en una caja de cartón, fue dejada una granada de mano.
De acuerdo con las primeras investigaciones practicadas por personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Baja California, la amenaza de muerte va dirigida al comandante de la Policía Ministerial adscrito a la Unidad Especializada Contra el Narcomenudeo, de apellido Galván, a sus subordinados de apellidos Santoyo Núñez, Ramírez Castro, Ayala y uno más de apellido materno Cruz.
En el narcomensaje se indicó que el enervante mencionado les fue robado a los miembros de la célula de "Los Aquiles", sobre el Bulevar 2000, cuando fueron interceptados por los policías ministeriales. Ahí los despojaron de la droga que transportaban en vehículos.
Tras el hallazgo, elementos del Ejército Mexicano con la agrupación de materiales explosivos arribaron al lugar de los hechos para recoger el artefacto y comenzar la búsqueda de los responsables
ERM