Introduzco el tema, recordando que la biotecnología es el uso de organismos vivos para la obtención de un bien o servicio en beneficio del hombre. Ahora bien, la biotecnología dependiendo del área a la cual es aplicada se puede clasificar de la siguiente manera:
Biotecnología Roja: Cuando las investigaciones y recursos son empleados en el ámbito de la medicina, para generar nuevos caminos para combatir enfermedades, algunos ejemplos son: organismos para producir antibióticos, vacunas y nuevos fármacos, destacan los diagnósticos moleculares y el desarrollo de la ingeniería genética.
Biotecnología Blanca: Enfocada al desarrollo de nuevos productos en el sector industrial, ejemplos: diferentes enzimas usadas como catalizadores industriales para destruir contaminantes químicos peligrosos, hoy en día la biotecnología blanca tiene mayor impacto en el sector textil ya que se han desarrollado plásticos biodegradables o los famosos biocombustibles, los cuales tienen la ventaja de consumir menos cantidad de energía y por tanto generen menos desechos industriales durante su producción.
Biotecnología verde: Rama de la biotecnología ligada con el desarrollo sustentable ya que está enfocada al sector agrícola en el desarrollo de plantas transgénicas, las cuales son capaces de crecer en condiciones extremas y durante todo el año.
Por último la biotecnología azul que tiene aplicaciones enfocados a ambientes marinos y acuáticos, esta rama aún está en fase de desarrollo, pero con grandes esperanzas para su aplicación en la acuicultura y sector alimentario.
Con este breve panorama biotecnológico, podemos ver la importancia de la materia como también sus implicaciones en la sociedad, es por ello que el Tecnológico de Monterrey, Campus Hidalgo, preocupado por ofrecer programas innovadores, imparte carreras que están a la vanguardia, seguidos siempre por nuestros valores que logran formar líderes emprendedores con sentido humano y competitivos internacionalmente.
Ing. Paloma Ortega Pérez
Directora de Carrera de IBT/IAB