Paren el mundo que me quiero bajar”. Hoy muchos traemos a Mafalda en la mente y estamos experimentando ese sentir, y en especial los niños. A dos años de una pandemia, ahora estamos siendo testigos de lo que los jóvenes ya la han nombrado “tercera guerra mundial”. Y como si no fuera suficiente llega una nueva crisis en nuestro estado: la falta de agua. Son muchos temas para manejar mentalmente y en casa, que si no contamos con toda la información solo nos produce miedo o desanimo.
Los niños y millennials no nacieron con un conflicto mundial en la mente. Y hoy, desde los más pequeños, quieren saber qué es la guerra. Les parece increíble que una nación quiera invadir otra. No entienden el porqué. El resto, crecimos con los rastros de la Segunda Guerra Mundial, Hitler, la caída del muro de Berlín, la guerra fría o los campos de concentración. Sabemos los efectos desgarradores y multiplicadores de la guerra. Y lo recordamos hoy de frente, con personas reales que comparten sus pérdidas en las redes sociales. Hemos seguido de cerca las miles de familias que buscan refugio, otras separadas por el conflicto y soldados invadiendo un país libre y soberano.
¿Por qué preocuparnos por una guerra tan lejana, cuando en México mueren miles de personas al año a causa de la inseguridad? El crimen organizado es una constante y parece que a eso nos hemos acostumbrado. Es nuestra realidad pendiente y desgarradora, pero no deja de impactarnos la posibilidad de una nueva guerra entre naciones.
Aquí en nuestro México necesitamos resolver nuestra propia guerra, esa que el Presidente no acepta, pero que los hechos nos recuerda a diario. Apenas este fin de semana los medios comparaban las muertes en Ucrania versus las que vivimos en México en los mismos días, por ejecuciones. Una mínima diferencia.
Ente tanto acontecimiento: guerra, inseguridad o crisis, no nos queda más que conocer y saber que está pasando. La mejor manera de enfrentar una crisis es estar informado. Compartir información simple y real, sobre todo con jóvenes y niños. Ellos quieren ayudar, quieren ser parte de la solución. Sí, el mundo va muy de prisa, pero con información podemos sortearlo mejor.
Valeria Guerra
