La pobreza incrementa la gran crisis mexicana y rompe el tejido social, sorprende a cualquier experto que nuestro país continúe en este camino.
Aunado a la mala estrategia de erradicarla, es algo sorprendente la incidencia de la pobreza en un país tan rico como lo es México, que no le falta nada salvo un sistema de administración pública con más ética, profesionalismo y menos corrupción. Que sea más decisivo, contundente y devastador con una economía creciente que involucre a la sociedad para amar a su tierra a través de la educación.
Para combatir la pobreza no solo basta el paternalismo, sino operar y plantear proyectos reales que beneficien al pueblo, ser productivos y competitivos; a la fecha los gobiernos siguen haciendo programas electoreros, condicionando su apoyo para continuar en el poder, continúan fabricando más millonarios a costa de generar millones de pobres.
Desde luego, nadie puede ignorar el desastre de la gran crisis que tiene México, por ello, no existe alguien que demuestre lo contrario o que ponga en duda lo que vivimos.
La pobreza evoca continuar con viejas prácticas políticas más que el afán de transformar al país conservando las malas costumbres de los políticos y sus partidos. Aunado a esto, la lógica de pobreza ha llegado a las instituciones de gobierno federal donde repercute en la vieja dinámica que ha afectado hasta la esperanza de los mexicanos, cuyo valor va decreciendo con la cuarta transformación que aborda ese tema e involucra la invulnerabilidad con el riesgo de padecer una crisis sin fin.
Por ejemplo, lo que está ocurriendo con las instituciones gubernamentales, donde al aplicar las políticas de austeridad emanadas del gobierno federal, están padeciendo la peor crisis de falta de recursos para cumplir con sus tareas cotidianas generando una imagen de “nueva pobreza federal”.
Es obligación del gobierno retomar una nueva dirección de la gestión pública que permita a la administración pública en Hidalgo mejorar su operación con la liquidación de adeudos a proveedores como ocurrió con los cortes de CFE en diversas unidades. Lo anterior va en contra de las buenas acciones del gobernador.