Brian Rodríguez tiene la puerta abierta del América siempre y cuando llegue una oferta que realmente valga la pena en lo económico para el club y el jugador, así como en lo deportivo para el volante uruguayo. Una oferta que realmente mueva al jugador y que le de posibilidades de pelear y mantenerse en el reflector del entrenador de la selección de Uruguay, ya que la Copa del Mundo es el objetivo principal.
Como cada seis meses llegan rumores de su posible salida, pero sin tener una oferta firme y contundente por el jugador; Fiorentina de Italia, Inter de Miami de la MLS y así, han sonado varias; ahora de Qatar por la cantidad de ocho de millones de dólares, una oferta que en lo deportivo no llena al jugador y en lo económico al club le parece poco por el presente y futuro del futbolista, por lo que sí el jugador decide irse o cambiar de aires en este verano, el club no lo defenderá, pero la oferta tiene que ser mucho mejor de lo que ha llegado o se habla.
Boletos mundialistas, pocos y caros
Ayer se dio a conocer la fecha para la venta de boletos para la Copa del Mundo; el portal oficial sacó algunos a la venta sin ser los juegos de México en territorio nacional, sin embargo, los precios rondaban los 30 mil pesos, al ser de la zona hospitality, estos boletos como aficionados ofrecen una experiencia distinta, a su vez de asegurarte la presencia en el juego, ya que los diversos compromisos de FIFA con sus socios comerciales, televisoras o selecciones participantes harán que salgan a la venta una poca cantidad de boletos de las diferentes zonas, ya que eso estarían oscilando los 250 a 350 dólares, al darse cuenta que en esta zona los aficionados están dispuestos pagar lo que sea por estar en un juego de la Copa del Mundo.
Para los juegos de la Selección Mexicana y estimando un cuarto juego, el aficionado que busque asegurar su entrada en los cuatro diferentes juegos tendrá que desembolsar alrededor de 120 a 140 mil pesos, para no pasar premuras y tener la entrada segura.
No serán nada baratos los juegos de México en la Copa del Mundo, y a la venta saldrán pocos y caros.
Mexicanos poco valorados, ¿ignorancia o amiguismo?
La fuga de talento es algo muy recurrente en la liga mexicana de futbol, en la FMF y en general en el balompié mexicano, unos por falta de espacio, oportunidades, trabajo, confianza, un lugar que les permita desarrollarse u otra por la manera en que se toreaban en México, que se desconoce en la mayoría el concepto de proyecto.
Muchos mexicanos que bien podrían estar aplicando sus conocimientos y especialidades para buscar una mejor Liga o una mejor selección fueron desechados y en algunos casos echados por la llegada de nuevos directivos que lo que menos tienen es conocimiento, pero sí un muy buen conocido que los logró poner en donde están.
Bernardo Cueva especialista en jugadas a pelota parada en Guadalajara nuca encontró un lugar, nunca tuvo herramientas, apoyo, confianza para ejecutar todo lo que sabía, y se fue por la puerta de atrás y ahora es campeón del Mundial de Clubes con el Chelsea y dejando un antecedente de manera brillante al ser uno de los primeros activos de un club por el que él mismo pagó para su llegada, tres millones de euros pagó Chelsea por sus servicios.
Javier Arnaiz trabajando con Selección Mexicana como mandamás de la preparación física nunca tuvieron apoyo para desarrollar su sistema, llegaron los nuevos directivos en su mayoría recomendados, y lo primero que hicieron fue correrlo, porque desde su “brillante” visión no servía; hoy es preparador físico del primer equipo del Real Madrid.
A nivel directivo encontramos en los principales escritorios del Mónaco a Carlos Aviña, quien decidió irse para desarrollarse. Marco Garcés en el Celta, Severiano García en el Atlético de Madrid. Elisa Ceñal nutrióloga mexicana que tuvo la posibilidad de irse a Liga Premier y se mantiene de manera exitosa en el Aston Villa.
Estos son algunos que han encontrado una mejor oportunidad en otro lado, fuera de México, unos valorados, otros no tanto y que hoy en el futbol mexicano hacen falta en busca de un mejor futbol, ante la crisis aguda del balompié mexicano en toda su estructura.