Se acerca el momento de definir el futuro de nuestra ciudad, nuestro estado y del país. En once días los mexicanos estaremos eligiendo a nuestras autoridades, desde presidentes municipales hasta presidente del país para los siguientes tres o seis años. De ahí la importancia de nuestro voto y hacerlo con plena conciencia y responsabilidad.
No hay nada definido como quieren hacernos creer, que solo “falta el trámite”, es un exceso de soberbia. Tampoco hay que dejarse llevar por las encuestas, que bien utilizadas pueden marcar momentos, pero que en este proceso son utilizadas como herramientas de propaganda. Tampoco comprometamos nuestro voto por una dádiva o la promesa de algún programa social, esos ya son garantía constitucional, gane quien gane la elección, los programas sociales se van a mantener. Tampoco hay que creer todo lo que ofrecen, mienten sin recato alguno. Ahí está López Obrador, hace seis años ofreció pacificar el país, acabar con la corrupción y no hizo ni uno ni lo otro. Ofreció tener servicios de salud como Dinamarca, y no ha podido echar a andar una farmacia.
Los problemas del país son complejos y diversos, se necesita mucho más que lealtad y voluntad para gobernar con eficacia, se requiere capacidad, trabajo con expertos, experiencia, valor y respeto a la ley.
Todavía hay tiempo de analizar, votemos por candidatos que sean íntegros y honestos, que se conduzcan con valores ellos y sus familias, que tengan buena fama pública y su forma de vida, sus bienes y propiedades correspondan a sus ingresos y obtenidos a lo largo de su vida laboral. Y si además tienen sensibilidad social, compromiso, conocimientos y tratan a todos con justicia, sin favoritismo, ni prejuicios y que todos sean escuchados, ya le ganamos.
Somos los ciudadanos los que elegimos con nuestro voto a quienes nos van a gobernar, no podemos dejar que unos cuantos decidan la suerte de 130 millones de mexicanos. Hagamos que nuestro voto sea útil, que sirva, puede ser que ningún candidato nos “llene el ojo”, pero votemos por el que esté en competencia.
La votación del próximo 2 de junio es tan importante para los mexicanos, que no podemos dejarla solo en manos de los políticos. Vamos a votar.