Conforme avanzan las semanas posteriores a la llegada de Trump a la presidencia de Estados Unidos se aumenta más la tensión en diferentes regiones del mundo, su agenda política al interior de su país es una limpia anti latinos, es una abierta confrontación con quienes en su mayoría le dieron el voto y hoy con toda forma burda e ilegal los echa de ese país incluso a quienes han logrado su estancia legal, están desintegrando familias, allanando hogares por la fuerza, sometiendo personas frente a niños y todo tipo de vejaciones para expulsar a quienes arbitraria y unilateralmente consideran no debe permanecer en los Estados Unidos.
En cuanto a su relación con otras naciones hay una serie de ofensas y provocaciones políticas y económicas y hasta de carácter militar, es evidente que han elaborado una agenda agresiva con enorme carga ideológica desde su concepción militar y empresarial, su notoria actitud y comportamiento acorde a su historia de asumirse el polizonte del mundo con la plena autoridad de entrometerse en cualquier territorio y país para invadir militarmente y saquear sin importar las víctimas mortales que cuesten para lograr sus objetivos.
Es la visión empresarial en la conducción del Estado en donde lo que importa es la utilidad económica sin importar el impacto negativo en la sociedad propia y ajena, sin importar los daños al medio ambiente, lo que importa para esas visiones capitalistas son precisamente las ganancias a costa de lo que sea, de ahí sus amenazas comerciales con cada país con el que tenga relación y con ello aprovechando su poderío económico se imponen determinaciones unilaterales en calidad de extorsión política.
En estas formas y lenguajes de hacer política se despojan los leguajes y protocolos diplomáticos, sus formas agresivas y ofensivas provocan reacciones dentro de los Estados Unidos y en el mundo entero, con ello un reacuerpamiento de países y regiones económicas para rediseñar sus estrategias de desarrollo para replantear sus relaciones y alianzas comerciales.
Todo esta tensión política en el mundo está provocando una nueva conformación de bloques económicos y militares, ha servido para que algunos presidentes de diferentes países queden al descubierto con indignantes servilismos al imperio como es el caso de Milei de Argentina y Noboa de Ecuador quienes se han esmerado en alabar a Trump y sus políticas aún y cuando éstos resulten afectados en sus naciones, se hacen ver como colonias de traspatio de los Estados Unidos mendigando migajas económicas y de poder a costa de la humillación internacional.
En México hacen lo propio desde la oposición, fijan sus posturas alejados de patriotismo y desojados de dignidad quienes le imploran al presidente estadounidense que entre a invadir México y en un sueño guajiro derroque al gobierno de la presidenta Sheinbaum para revivir posibilidades de regresar al poder y recuperar los privilegios que tenían, la narrativa de la oposición está adaptada al lenguaje de Trump respecto a sus conceptos antisocialistas que según ellos incorporan su disputa al terreno ideológico del cual no tienen ni argumento ni idea.
La narrativa de la oposición es precisamente la convalidación del discurso de Trump para denostar y calumniar al gobierno sobre las supuestas relaciones con grupos del crimen organizado, fieles a su historia malinchista la oposición está del lado del extranjero que aspira a invadir México y despojarle lo que se pueda.
