Estados Unidos está intentando mediar un acuerdo de paz entre Ucrania y Rusia. La realidad es que es bien conocida la afinidad entre Trump y Putin y según las últimas declaraciones de la Casa Blanca, para que se diera esta guerra, uno de los motivos fue la insistencia de Ucrania por ser parte de la OTAN, cosa que para Rusia no era una opción aceptar, por temas de seguridad nacional.
La realidad es que Rusia advirtió antes de comenzar la guerra y Ucrania bajo el liderazgo de Zelensky no escuchó razón apelando a su soberanía, sumado a lo anterior, la OTAN encontró conveniente aceptar a Ucrania sin importarle la vulnerabilidad en que se ponía a Rusia y la respuesta que conocían iba a tener Putin.
Parecería que la administración pasada de USA y la Unión Europea encontraron una oportunidad en esta disputa y alentaron a Ucrania a aventurarse a esta guerra sin sentido que cobró ya miles de vidas de ciudadanos inocentes.
Por supuesto no defiendo a Rusia, pero sí creo que la falta de experiencia política, diplomática e incluso militar de Zelensky fue un factor fundamental para no saber negociar no solo con los miembros de la OTAN sino con la misma Rusia, consensuar con los Ucranianos y entender el alcance de las repercusiones de sus decisiones.
Ahora, la situación cambió con la administración de Trump, quien ha apoyado a Rusia en su desacuerdo con que Ucrania sea miembro de la OTAN y ha entendido las razones de Putin. Sin Estados Unidos como aliado, a Ucrania no le quedará más que ceder a las peticiones de Rusia, cosa que pudo o debió haber hecho desde el principio, entendiendo que Rusia no iba a permitir algo que los pusiera en riesgo latente.
Tampoco será opción dar la espalda a estás negociaciones pues Zelensky estaría prácticamente solo, con algunos aliados de la Unión Europea que tampoco quieren meterse en problemas con Estados Unidos.
En fin, el panorama pinta difícil para Zelensky, quien a mí parecer no saldrá de esta como un héroe de guerra o un patriota que defendió a su país, sino más bien como un inexperto que se quiso poner con sansón a las patadas y por supuesto no solo perdió él, sino su país, con la pérdida de vidas inocentes para acabar justo por donde hubieran empezado: un poco menos de soberbia, más entendimiento del contexto geopolítico e histórico, y haber escuchado a los expertos.