En las últimas semanas se han ido perfilando los nombres de las mujeres que aspiran a la gubernatura, y algunas con más posibilidades que otras, pero la baraja se amplía conforme avanzan los tiempos electorales en Puebla.
Mientras se define la cuota de género para la elección local, en los partidos políticos más de una suspirante han levantado la mano, pues independientemente de la decisión consideran oportuno irse preparando por si le toca a una mujer.
Algunas con más popularidad que otras, pero ya se perfilan los nombres de personajes como Olivia Salomón, secretaria de Economía estatal, quien desde la gestión del extinto gobernador Miguel Barbosa se le mencionaba como una seria aspirante por parte de ese grupo.
La funcionaria goza de una buena imagen ante el empresariado poblano, que no la ve tan "cuatroté" como a Claudia Rivera, la ex alcaldesa morenista, que a decir de la actual administración municipal dejó un desastre en diferentes áreas.
A Olivia se le relaciona con el grupo del ex gobernador Pacheco Pulido, y concretamente con su hijo Javier Pacheco Pensado, con quien tiene una cercanía y desde hace tiempo, hasta algunos temas de negocio.
Por su parte, en días recientes y después de la dolorosa pérdida de su esposo, doña Rosario Orozco ha retomado sus actividades políticas con miras a una posible candidatura, y si bien no se descarta para el gobierno del estado, tampoco le hace el feo a una diputación federal o al Senado.
Para nadie es un secreto que la viuda de Barbosa no la lleva bien con Salomón, y en un momento dado ella considera tener muchos más méritos que la secretaria, de quien señala tiene una corta militancia en el Movimiento de Regeneración Nacional.
Por el lado del PAN, la senadora Nadia Navarro está más que anotada para entrar a una contienda interna, aunque sabe que el tema todavía sigue pendiente, porque en el blanquiazul parecen ir lentos en ese proceso.
Seguramente de aquí a que se determine si la candidata para Puebla sería mujer, todas tienen posibilidades, con excepción del secretario de Gobernación, Julio Huerta, quien ya anunció que por ningún motivo se hará "la jarocha".