No creo que una sola de estas famosas series que estén en los servicios de streaming supere a la realidad mexicana, un video, ese en el que un funcionario reparte bolsas con dinero supuestamente para maicear a los legisladores federales a cambio de aprobar las reformas estructurales dio paso a otro donde supuestamente un hermano del Presidente también está recibiendo dinero.
¿Cuántos videos más debe de haber por ahí guardados listos para utilizarse en el momento preciso para exhibir al oponente? no sabemos pero de lo que sí estamos seguros es que esta temporada de caza apenas empieza pues lo único que la detona es el período electoral en puerta, donde la única bandera que sostiene la 4T es el supuesto combate a la corrupción, sin que hasta este momento esté uno solo de los involucrados vinculado a proceso.
Hoy a la cuarta transformación le urge un fuego que mantenga prendida la única brasa con la que puede competir, pues en otros frentes no ha resultado tan innovadora como para hablar de una transformación del país como los famosos megaproyectos que poco significan hoy para muchos mexicanos que viven aún sumidos en la miseria y miles más que se sumarán a las filas de la pobreza en esta pandemia.
Pero en este momento es donde me detengo a pensar y me pregunto, ¿qué pasó con Carlos Romero Deschamps? porque en todo este brete del Pemex-Gate, Emilio Lozoya, ex presidentes, diputados, senadores y gobernadores involucrados no me vengan con el cuento que Romero Deschamps es una blanca paloma.
Lo verdaderamente grave sería que el líder petrolero, pues se sabe que todavía mueve los hilos en el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, es que el señor haya comprado su libertad como ya parece que la compró Emilio Lozoya, quien no parece que vaya un día a pisar la cárcel gracias a que se prestó a “colaborar” con las autoridades.
No me digan que el ex dirigente petrolero no estaba enterado de todos los negocios hechos con Pemex, no hay manera de que Romero se salve de cuando menos una revisadita en sus posesiones, derivada de las investigaciones por Odebrecht, el tema es qué tan conveniente es para el poder llevarlo a juicio.
¿Ya se arregló?