Me parece una verdadera tontería eso de comparar el número de muertos por coronavirus con el número de homicidios dolosos registrados en el país, nada tiene que ver una cosa con la otra, ni siquiera para ejemplificar nada, pues son dos fenómenos diferentes uno que tiene que ver con la salud pública.
Las muertes por coronavirus no son homicidios, son fallecimientos por enfermedad en donde no hay un homicida, sino un vector que es responsable de la transmisión del agente contagioso que provoca la enfermedad, aquí está en juego la vida de personas sin importar situación socioeconómica o posición política, pueden contagiarse y morir en el peor de los escenarios.
Por eso el querer mezclar agua con aceite me parece una estupidez, y pretender disfrazar maquiavélicamente un problema que no se ha podido solucionar, el de la inseguridad. ¡Hágame el reverendo favor! ya oigo decir a los responsables de la seguridad que el problema no es tan malo como el del coronavirus y lavarse las manos poniendo como judas a los encargados de la salud pública y como Pilatos a los de seguridad.
Sí, habrá muchos muertos por coronavirus y jure que muchos más que de víctimas de homicidios, es hasta lógico pensar en que un agente viral tiene mucho más alcance que las balas de los delincuentes. Ahora falta que digan que hay más enfermos de diabetes que robos en casa habitación o tonterías de esas.
Duele que nuestro país como todo el orbe esté enfrentando esta pandemia con la muerte de cientos de miles de personas, pero duele más que en muchos casos producto de las guerras intestinas del crimen organizado muera gente que no tenía que morir.
Leo el caso del juez Uriel Villegas Ortiz, asesinado junto a su esposa en la ciudad de Colima afuera de su casa, dejando en la orfandad a dos pequeñas niñas, un crimen artero que deberá ser resuelto por las autoridades y hacer que paguen los responsables, juzgador íntegro decidió dejar de lado el servicio de protección que tenía, dijo sentirse seguro y pagó con su vida el que no le temblara la mano para castigar criminales.
Contra el covid-19 algún día habrá vacuna… ¿contra los criminales también?