El viernes platiqué con mi Judas Puma porque yo sentía que Pachuca les iba a ganar… y así fue. Le pregunté ese viernes que qué pasaría si los Tuzos volvían a provocar una derrota del cuadro del Pedregal.
Me dijo, insisto, eeese viernes, que lo más seguro era que se quedara hasta el final del torneo.
Mi primera reacción fue: “¿Por qué si están cada vez peor, juegan a nada y no tienen rumbo?”.
Su respuesta fue: “¡Te lo dije la semana pasada, nooo es porque creamos en él, no, es porque nadie lo quiere agarrar!”.
Señores, hasta ahí el viernes. A eso ha llegado Pumas, a nadie quererlo dirigir porque es un remedo de equipo.
Pos bueno, el equipo jugó ayer como siempre juega y volvió a perder, pero ya fue diferente.
El público se metió fuertemente con el entrenador, cantó “que se vayan todos” y le lanzó proyectiles cuando el cuerpo técnico se metía a los vestidores.
Horas más tarde Pumas anunció su cese.
¿Qué pasó?, pues que ya no aguantaron más. El equipo ha tocado fondo y aquí viene lo nuevo.
Me contó que hay jugadores que muy rápido se cansaron de las “indicaciones” motivacionales de su entonces DT. Esto no me lo contó mi Judas como si él lo hubiera escuchado; él se enteró por uno de los jugadores.
“Ya se dieron cuenta que todo es ‘resiliencia’, que todo es motivación, que todo es ‘trabajo’, ‘herramientas’ y no hay nada de profundidad”.
Tal cual me lo dijo. También me comentó que esto ya lo sabían arriba, en la directiva, que ya se habían dado cuenta, pero que no lo despedían porque no había más.
Sin embargo, se cansaron ya de tanta derrota, de tanto fracaso semana a semana y que no se veía ningún avance.
Hoy se da cuenta Pumas que lo barato sale caro, que tuvo en sus manos a Ricardo Ferretti para levantar al equipo, que si desembolsaban 450 mil dólares más al año lo hubieran tenido, pero no.
Su presidente Polo Silva demostró que de futbol sabe poco y se dejó engatusar por Puente del Río, quien con su labia lo convenció de que no contratara al Tuca y se decidiera por él.
El sueldo de Rafa era bajo, de hecho, pero ya se dieron cuenta que eso, incluso a corto plazo, sale más caro.
¿Y allá?
Y el ejemplo está en esta misma CdMx con el Cruz Azul.
Polo Silva prefirió —a costa del deseo de Miguel Mejía Barón— a Puente y mandó decirle a Tuca que no sería él.
¿Qué fue de Pumas?, lo que ya vimos, un desastre de la mano de Rafael.
¿Qué fue de Tuca?, tomó al Azul en el lugar 17 con cero victorias y ahora ya está en el 8vo y con un partido menos.
Hoy Polo Silva se ha de estar arrepintiendo de su decisión tan mala de diciembre.
PD: Así es el futbol… cuando no se sabe manejar correctamente a un equipo.
