La semana pasada causó revuelo la difusión de unas conversaciones privadas en donde el líder nacional del Partido Acción Nacional, Marko Cortés Mendoza, prácticamente daba por perdido todo lo que estará en juego durante los comicios de 2022 y 2024 en cuanto a gubernaturas e incluso la Presidencia de la República.
Sorprende no tanto por el supuesto arranque de franqueza que sinceramente advierte un derrotismo anticipado en el fondo, sino porque como uno de los cánones básicos de la actividad política está el no admitir la derrota a menos que esta sea una cosa consumada y contundente en las urnas.
Seguramente se recordará que cualquier candidato, así sea del partido con menor simpatía y votación acaso marginal, durante toda su campaña alegará que existen posibilidades de triunfar, aún contra toda estadística y encuesta en contra.
Porque -a menos que vaya a declinar en favor de otro contendiente- ¿con qué cara mira se plantará ante sus simpatizantes si da por perdida la elección?
Algo así le sucedió al líder nacional del blanquiazul, a quien mientras algunos salieron en su defensa al resaltar la autocrítica y esas palabras como un llamado sensato a redoblar esfuerzos para elegir bien a quienes encabezarán las candidaturas y reforzar las estructuras territoriales para la defensa del voto en los comicios que vendrán, una simple advertencia, pues.
Lo cierto es que las encuestas y el pobre desempeño que ha hecho que el PAN pierda competitividad en los últimos procesos electorales, amén de las alianzas políticas de antaño, en bloque con otros partidos de oposición, no se ven tan firmes en el horizonte, hace que lo dicho por Cortés cobre relevancia.
A nivel local, el desempeño de Acción Nacional no ha sido del todo catastrófico.
Más aún sigue manteniendo una base amplia de voto duro que puede ser un valioso aporte a los números a nivel nacional, dadas las circunstancias.
Conviene que los panistas de Guanajuato tomen un momento para reflexionar y si es necesario retomar el rumbo para conservar la entidad como principal bastión albiazul a nivel nacional.
