Hace unos días, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció que no habría "gasolinazo" en los primeros días de febrero. Muchos -incluida yo- respiramos. A nadie le viene mal que el gobierno tome una medida popular y en beneficio de nuestros bolsillos. Pero, como siempre sucede, la tranquilidad nos dura un rato y olvidamos muy pronto: el plan de liberar el precio de las gasolinas sube, la SHCP sigue siendo la encargada de fijar el precio hasta que esta liberación se dé y no tenemos una idea clara de las consecuencias o alcances de esta medida.
Además, como siempre sucede en estos casos, nunca falta quien se quiera beneficiar de este tipo de decisiones. Enrique Ochoa Reza, líder nacional del PRI, declaró que "gracias a las iniciativas del PRI, el nuevo gasolinazo no prosperó", como si a los contribuyentes se nos olvidara que es gracias al PRI, que la economía interna, familiar, la que nos importa todos los días, se tambalea ante cada nueva embestida presupuestal o fiscal del partido en el gobierno en turno.
Si el nuevo gasolinazo no prosperó fue, en gran medida, por el creciente descontento social en el país. Porque somos una sociedad cada vez más crítica y vigilante de lo que sucede a nuestro alrededor (y porque fue evidente el esfuerzo que hizo el PRI para desvirtuar la protesta social que surgió en los primeros días de enero). Somos una sociedad cada vez más conectada que llamamos al boicot, al paro, al reclamo, a la vigilancia de nuestros representantes. Si algo tendríamos que "agradecer" al PRI, es habernos unido en un frente común ante el abuso de autoridad y el desempacho que tuvo nuestro presidente al culparnos de habernos acabado "la gallina de los huevos de oro".
Somos esa generación que le dijo a Peña Nieto: "Nosotros nos hemos apretado el cinturón por sexenios, ¿ustedes para cuándo?". Que estamos organizándonos desde nuestras colonias, distritos y ciudades para proteger nuestros negocios, escuelas; y que no hemos aprendido a ser autosuficientes frente a intereses particulares y de grupo, que pretenden que nosotros sigamos trabajando para pagar su estilo de vida, su indiferencia e indolencia.
Por eso, te invito a seguir construyendo comunidad, redes de apoyo y de soporte con tus vecinos y familiares. Continuemos despertando, discutiendo y proponiendo, a pesar del PRI, a pesar de quienes nos exigen apretarnos el cinturón, mientras ellos se comen a la gallina de los huevos de oro. Puedes seguirme en redes en Twitter: @mariela_soro y en Facebook: /MarielaSolisRondero.
