Si bien es cierto que algunos fondos públicos fueron mal utilizados en sexenios pasados, con excesos y derroches en rubros fundamentales, la actitud adoptada por el Jefe del Ejecutivo federal y sus incondicionales a ultranza de Morena, de cancelar fideicomisos y recortes a esos renglones, -varios de ellos prioritarios- tampoco será la solución para acabar con dispendios.
El dejar sin dinero a estados de la república que enfrentan inundaciones por huracanes o derrumbes por terremotos, es una medida frívola que bien podría replantearse para que no existan derroches en la utilización de los fondos públicos que conformamos toda la clase productiva del país, vía impuestos.
Empero, la medida de los legisladores tirados al suelo a la merced del presidente López Obrador para aprobar leyes a su arbitrio, son con un fin único e indivisible: la elección federal del 2021, donde al precio que sea, querrá ganar de nueva cuenta la mayoría en el Congreso federal, y persistir en imponer legislaciones aun en contra de la voluntad de la mayoría ciudadana.
De ahí que el grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados para seguir las órdenes lacayunas de su “líder moral”, amplió de 55 a 109 la lista de fideicomisos destinados a la extinción; sin embargo, redujo de 150 mil millones a solo 68 mil, el monto previsto para reasignaciones al sector salud y programas sociales del gobierno federal.
No obstante los absurdos y demagogos recortes, desapariciones a fondos y patrocinios de la Federación en sexenios pasados, se dejó establecido que el Fideicomiso del Fondo de Salud para el Bienestar que cuenta con un capital de 97 mil millones de pesos, no desaparecerá en los próximos tiempos para prevenir los casos de contagio que se presentarán por el Covid-19.
En esa absurda ampliación del listado se incluye la extinción de los Fondos Mixtos del Conacyt en las 32 entidades federativas, además de los ya previstos, como el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), el Fideicomiso Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine) y el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar), así como los 32 fondos ya referidos para proyectos científicos y tecnológicos en diversos centros de investigación.
Mario Delgado, presidente de la Junta de Coordinación Política y líder parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados, defendió la decisión de liquidar los fideicomisos al señalar que los recursos de dichos fondos se han ejercido con falta de transparencia y corrupción.
Lo más lamentable de la cancelación de muchos fondos y fideicomisos, así como la disminución en sus percepciones, alcances y repartos, es que muchos programas se quedarán sin desarrollo y entre lo más penoso es que atletas mexicanos de alto rendimiento se quedarán en la orilla y lo que se había destinado así como las decenas de millones de pesos para que se prepararan con miras a su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio que se celebrarían en agosto pasado, ya no tendrán ninguna proyección ni meta que cumplir. Viva México!
Notas de Trascendencia
Raúl Bermúdez Arreola, delegado de Fonatur en Quintana Roo, sufre los embates de náuticos, ciclistas, turistas, hoteleros y visitantes de Cancún, por la serie de arbitrariedades que comete todos los días, debido a que según su dicho, nada se mueve en la Zona Hotelera del paradisíaco sitial de arena y playa más importante de México, si el propio Bermúdez no alza la voz para aprobar permisos y concesiones graciosas.
El miércoles anterior, hace un par de días para ser exactos, habitantes de condominios de la propia Zona Hotelera se manifestaron en contra del propio delegado federal, quien cada vez es blanco de ataques y denuncias por la forma en que “administra” el apéndice gubernamental.
Aguakan, la concesionaria para suministrar el vital líquido a Cancún, se quejó ante el gobierno estatal y el federal, debido a la negligencia con la que actúa la dependencia y su titular, porque no otorga en tiempo los permisos respectivos para reparar fallas técnicas y término de obras determinadas, que por lo regular eran autorizadas en un plazo máximo de 3 días y varias de ellas tienen un rezago de más de 3 meses!
Lo más absurdo de todo es que persiste inamovible en su encargo, según esgrime con voz en cuello de que es muy influyente y amigo personal de López Obrador.