¿Cómo distinguir objetivamente lo que te impulsa a realizar una compra y saber si eres un comprador responsable, astuto e inteligente? Revisa estos puntos:
1. Compro un producto para satisfacer una necesidad, y no busco la necesidad cuando ya compré el producto.
2. Consumo para satisfacer una necesidad real familiar, y no para satisfacer un deseo personal, inclusive para demostrar que pertenezco a cierto nivel social.
3. Con la compra del producto no pretendo sustituir o compensar la falta de tiempo y atención hacia mi pareja, hijos y/o padres.
4. Compro algún lujo siempre y cuando no ponga en riesgo la economía ni el bienestar de la familia en el futuro.
5. Sólo compro un artículo cuando ya no funciona correctamente el que poseo, o si su mantenimiento es muy costoso, o porque sus funciones ya no me son útiles; pero nunca lo cambio sólo para estar a la moda o porque mi mejor amigo o un familiar ya tiene uno igual.
6. Procuro comprar sólo si tengo el dinero para ello, comprendiendo que siempre será mejor ahorrar que endeudarse siendo paciente con aquello que anhelo. Primero junto el dinero y compro y no compro y después veo de donde obtengo el dinero para pagarlo.
7. Antes de adquirir un producto comparo precios, modelos y los servicios de posventa en varias tiendas o proveedores.
8. Ante la cercanía de época de promociones, verifico los precios antes de que se publiquen las ofertas, para así confirmar que las supuestas ofertas son reales y me representen un ahorro real en mi bolsillo.
9. Sólo tomo un crédito como última opción, buscando que tenga la tasa más baja, después de revisar mis finanzas personales y mi capacidad de pago.
10. Al acudir a un centro comercial ya llevo en mente o de manera escrita mis necesidades y no nado deambulando por los pasillos haber que se me atraviesa en el camino.