Parece que en todo la historia se repite, se regresa a semáforo rojo, habrá confinamiento, negocios no esenciales cerrarán o trabajarán a su mínima expresión y volvieron los "consejos" para "acabar" con el covid-19.
Se habían tardado todos aquellos que gustan de mandar recetas para combatir al coronavirus, por lo que muchos mensajes han empezado a aparecer en facebook e inundar el whats app.
Lo malo es que muchas personas se dejan llevar por aquellos que envían soluciones para combatir a este mortal virus, dando las recetas hasta de la abuela, diciendo que si se hacen gárgaras de agua con sal, si se toma miel, si se hacen infusiones de eucalipto, así como tomar tés de ajo, jengibre, así como remedios caseros que nada tienen que ver con el coronavirus.
Pero hay personas que ante el temor de los contagios o al saber que están contagiadas, no dudan en hacer y tomar todo lo que dicen en las redes sociales, ya que si no les hace bien, tampoco les hace mal.
Pero además, están subiendo también mensajes de personas que se "mejoraron" con tal o cual remedio y además, aparecen muchos videos en los que personas dan testimonios de la forma que han reaccionado luego de que siguieran al pie de la letra tal o cual "receta".
Pero no solamente eso, hay muchos que también suben videos de supuestos doctores, quienes dan una letanía sobre el covid-19, los síntomas y algunos hasta hablan de medicamentos que pueden evitar que muchas personas se infecten.
Pero otros van más allá, ya que hablan con tal de seguridad que convencen a quienes los observan, que logran que muchas personas sigan todos los pasos para evitar que el coronavirus entre a los pulmones y evite que estos colapsen.
Esto que se vive es lo mismo que pasó cuando inició la cuarentena y parece que hay muchos que no quieren entender que el mejor remedio que se puede aplicar para combatir este virus es el quedarse en casa, es el uso del cubre bocas, es guardar la sana distancia y además, mantener limpias las manos con desinfectantes o gel antibacterial.
Además, extremar precauciones en los hogares, en el trabajo manteniendo una limpieza constante.
Ni modo, el recibir mensajes ya es parte de la vida diaria y el hacerles caso es cosa de cada quien.