El pronóstico del tiempo marcaba posibilidades de lluvias en la zona metropolitana de La Laguna, pero no se esperaba que se dejaran sentir en forma de tromba, misma que en cuestión de segundos provocó caos, miedo, terror y mucha, pero mucha destrucción.
En Torreón, fueron las colonias del poniente en las que más afectaciones se observaron, en donde las corrientes que se formaron arrastraron de todo, hasta vehículos y muchas viviendas se inundaron.
En el lado de Gómez Palacio, las afectaciones fueron considerables y la misma noche del miércoles, el paso a desnivel 11-40 se inundó, dejando a dos vehículos varados con todo y sus tripulantes, los cuales fueron puestos a salvo por cuerpos de seguridad.
En el ejido Poanas del mismo municipio, la fuerte lluvia causó serios estragos en las viviendas, por lo que la población tuvo que ser auxiliada de inmediato.
En Bermejillo, municipio de Mapimí, también vivieron momentos difíciles, ya que el torrencial aguacero provocó serias inundaciones y daños materiales.
Por fortuna, todo quedó sólo en daños, no hubo personas lesionadas ni fallecidas, como tampoco arrastradas por la fuerte corriente, quedando todo en un susto.
Ahora las autoridades tendrán que trabajar a marchas forzadas, tendrán que auxiliar a quienes sufrieron los embates de la tromba, a quienes deberán apoyar no solamente moralmente como es una costumbre, sino en la reconstrucción de viviendas que se vieron gravemente afectadas, así como con aquellas familias que perdieron todos sus muebles al quedar inundadas.
En Torreón, los daños fueron cuantiosos, mientras que en Gómez Palacio, el paso a desnivel fue desagüado, pero en el ejido Poanas, las afectaciones sí afectaron a la población, por lo que la alcaldesa Marina Vitela dijo que se pedirá para comunidad una declaratoria de emergencia.
Estuvo tan fuerte la lluvia en La Laguna de Durango, que hasta el mismo José Rosas Aispuro, gobernador del estado, se trasladó a la región para valorar los daños y ver la forma de apoyar a quienes resultaron afectados.
Fue en segundos en que las nubes dejaron sentir toda su fuerza y en esos segundos, se perdieron desde vehículos, hasta viviendas.
Ojalá viene la valoración de los daños y la reconstrucción.