Política

Las costuras de una ley

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No se esperaban un escándalo nacional, supongo. Me pregunto qué sucederá en el interior de un Congreso como el de Nuevo León para que, en medio de la diversidad y las rupturas partidistas, de repente se vote por amplia mayoría una ley de objeción de conciencia contraria a las garantías constitucionales, que limita seriamente el acceso de ciudadanos a los servicios de salud y que ya había sido impugnada por la CNDH.

La historia no llega lejos. Cuando la Suprema Corte de Justicia envió el mensaje de “ni le busquen, no pueden impedir el matrimonio entre personas del mismo sexo”, en el Congreso de Nuevo León se empezó a desempolvar una reforma constitucional que permanecía en la congeladora desde 2014, ya aprobada en primera vuelta.

El 7 de marzo se votó, en menos de 24 horas, el blindaje del estado ante una eventual despenalización del aborto. Con apoyo de todas las bancadas para lograr mayoría calificada, Nuevo León se convirtió en el estado número 19 en aprobar la llamada reforma constitucional por el derecho a la vida.

En abril, un personaje clave, todavía en el grupo de Morena y todavía diputado, Juan Carlos Leal, presentó tres iniciativas de objeción de conciencia. Después, tras una serie de comentarios homofóbicos, Leal acabó fuera de la bancada de Morena para formar parte del aún existente grupo legislativo del PES. Finalmente pidió licencia como diputado y, cosas de la magia legislativa, su suplente llegó a sumarse a la bancada ¡del PRI!

Sí, septiembre fue el mes de la sopa del dominó en las bancadas. Movimiento Ciudadano se llevó a dos diputados: una del PES y otro de Morena. Morena se cobro quitándole dos al PRI, arrancándole su medalla de segunda fuerza. El PRI reaccionó como pudo: tomó prestados, literal, dos del PT y además se llevó al suplente de Leal, quien aceptó el trato mientras no dejaran morir sus iniciativas de objeción de conciencia.

Octubre: quien presentó el dictamen al Pleno fue la maestra Guadalupe Rodríguez de Anaya, petista de siempre y directora del sistema educativo Cendi. Después se tuvo que tragar la vergüenza de avalar una decisión anticonstitucional que convierte su valioso trabajo educativo en sospechoso anti LGBT. Seguramente ni se enteró hasta que llegó la crítica, la opinión de la CNDH y de la Secretaria de Salud, junto con la decisión de veto por parte del gobierno estatal.

¿Qué pasa en un Congreso donde se puede aprobar algo así? Ante las mocherías y las triquiñuelas de PAN y PRI y la debilidad del resto, lo que menos importa es el contenido puntual y fino de una ley.

Gana la necesidad de cumplir acuerdos a cambio de otros acuerdos y algo más, por encima de la revisión del voto y del interés por los que otros compañeros argumentan en tribuna. Así se filtran esas leyes desde la eternidad, mediante los más terrenales pactos.

Y gana el gen ultraconservador que cruza todas las bancadas y sus familias. Los hace súbditos de poderes por los que nadie votó y no les permite ver que su tarea legislativa va más allá de la coherencia con sus propios criterios morales y exige garantizar los servicios para todos.

El veto regresará la discusión. Mientras, adentro se preparan otras objeciones de conciencia para el registro civil y la escuela. 


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Luis Petersen Farah
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Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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