Muchos no lo toman en serio, dijo el secretario de Salud, Manuel de la O, el fin de semana. “Hay personas que no tienen mucha escolaridad y que no creen en este virus, o bien se creen inmunes”.
Claro, eso se nota en las calles, en los parques o en los lugares de recreo; el cuidado de la salud está lleno de agujeros, como un queso. Durante estos meses, el propio secretario de Salud ha intentado convencer a la población de guardar las distancias, de usar cubrebocas y de no salir más que a lo estrictamente necesario. Su éxito ha sido limitado.
Es una tarea difícil. Quizá el problema no es solamente de escolarización, es también de muchos que sí han ido por años a la escuela.
La SEP anunció ya a nivel federal una nueva materia para la educación básica, justamente para estos fines: vida saludable. Qué bueno. Incluirá nutrición, activación física, higiene y conocimiento de algunas enfermedades, todo con bases científicas.
La no creencia en el virus viene acompañada de otros escepticismos. Tampoco se cree en la relación que existe entre la gravedad del covid-19 y la presencia de enfermedades como diabetes o hipertensión, o de otras condiciones como la obesidad. Y se cree en remedios, polvos y milagros...
Pero el punto es que tal programa escolar es nuevo y en educación no hay cambios rápidos. Las personas requieren tiempo para apropiar los conocimientos y madurar. Las culturas, mucho más.
Requerirá años. El secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, lo subrayó el lunes. “En el mediano y largo plazo nos vamos a defender de la pandemia fortaleciendo nuestro sistema inmune con una sana nutrición, con ejercicio e higiene personal”.
Es ahora, sin embargo, cuando se requiere un cuidado de la salud sobre bases más científicas y menos mágicas. Y esto va más allá de campañas publicitarias, muy necesarias, pero que solo alcanzan para llamar la atención. Antes de que la escuela dé el resultado deseado, todos los centros de trabajo y las instituciones con posibilidades de capacitación deberían estar ya manos a la obra. Es urgente.