“Personaje interesante.”
Conozco a Aldo desde hace tiempo y nunca he entendido por qué se infiltró en la política y sobre todo en el tema de la seguridad, porque él no tiene ninguna necesidad financiera o de prestigio jurídico.
Aldo es un bohemio metido en la política y como se enojó con Rodrigo Medina porque no le dieron la opción de ser alcalde, entonces se asoció con El Bronco y ha formado parte del equipo del gobernador, con diferentes fórmulas estratégicas, tanto en el ámbito del derecho como en el de la comunicación y en el de la procuración de justicia, asociándose con el sistema anticorrupción en forma contra natura, porque no es un abogado penalista bien conocido.
Ahora acaba de renunciar a su elegante posición con El Bronco y está empezando la búsqueda de los apoyos necesarios para ser candidato a alcalde del municipio de Monterrey, que está siendo muy bien gobernado por el ex procurador Adrián de la Garza y en el cual la calma y la tranquilidad son las recetas permanentes a la problemática existente.
Sin embargo, nadie puede meterse dentro del cerebro de otra persona y nadie puede evitar tampoco que llegue con los momios en contra, es como si los Tigres jugaran contra el Barcelona. Como Aldo representa a los Tigres y el alcalde actual al Barcelona y los independientes ya no son tan simpáticos como fueron antes, les recomendaría que escogieran otros lugares, donde él puede, como sabe hacerlo, desarrollar un buen servicio público, sin arriesgar tanto la buena imagen que él y su familia poseen.
DESCARTES: Pienso, luego existo… Hay que saber escoger lugar y tiempo.
