En días recientes se publicaron reportes que Televisa busca fusionar su división de cable e Internet (conocida como Izzi) con Megacable. La propuesta hace mucho sentido. Pero para que se concrete tienen que pasar dos cosas: Televisa tiene que mejorar su oferta y los reguladores tienen que aprobarla.
La acción de Megacable ha estado por los suelos durante años. Su desempeño ha sido muy inferior al de la BMV. Para mejorar sus perspectivas, la cablera anunció hace unos meses un agresivo plan de inversión; sin embargo, no le gustó al mercado. Lo que propuso fue invertir una fortuna para entrar a ciudades en las que no tiene presencia y así aumentar sus ventas. El problema es que la competencia en estas ciudades es brutal. Existen jugadores bien atrincherados a los que no será fácil (ni barato) quitarles clientes. Televisa ha tenido sus propios problemas. La negativa del mercado sobre las perspectivas de las empresas se refleja en sus valuaciones. Ambas cotizan a un múltiplo de Ebitda inferior a 4x. De aquí que haga sentido explorar opciones.
Lo que propone Televisa es fusionar Izzi con Megacable y distribuir las acciones 55% y 45%, respectivamente. La oferta le otorga un premio al múltiplo de Ebitda de Megacable de 19% e incluye un dividendo extraordinario por 14 mil 800 millones de pesos para sus accionistas. No obstante, el consejo de la cablera rechazó por unanimidad la oferta.
Lo entiendo. Aunque su acción está muy baja, Megacable tiene un excelente flujo de efectivo y los dividendos que reparte son atractivos. No tiene ninguna urgencia. Además, en el pasado ha cotizado a múltiplos muy superiores. Me parece que un factor adicional del rechazo es que el consejo y los directivos no quieren perder su independencia y reportarles a los jefes de Televisa. Se requerirá de un mejor precio para convencerlos.
Pero la fusión puede generar tanto valor que existe un amplio campo de maniobra para lograr un acuerdo sobre los términos. Megacable puede reducir sustancialmente sus inversiones puesto que Televisa ya tiene presencia en las ciudades en las que quiere entrar. Asimismo, la fusión generaría sinergias importantes, principalmente en reducción de gastos duplicados. Televisa estima que se pueden ahorrar hasta 9 mil millones de pesos al año. La combinación Izzi-Megacable ayudaría a poner orden a un mercado muy competido, en el que recientemente se vive una guerra de precios.
El problema de que los beneficios para las empresas sean tan grandes es que algunos pueden venir en detrimento de los consumidores y esto no le va a gustar al regulador. La fusión eliminaría un competidor para crear un operador líder en el país. Un factor que puede mitigar esta preocupación es que las operaciones de Izzi y Megacable se empalman poco (en la mayoría de las ciudades donde está una no está la otra). El regulador también puede pedir concesiones (como la venta de Sky) para minimizar el riesgo de concentración de mercado.
Julio Serrano