La propuesta de realizar un Himno a las bibliotecas públicas no es sino pinchar, con las garras del león, a los rufianes de la ignorancia, los cuales abundan en la ciudad con la mediocridad a cuestas. En este primer León de la América que luego vivió su independencia también de la antigua España, nuestra villa tuvo en aquel lejano 1824, el Primer Gabinete Público de Lectura en todo Guanajuato. La iluminación de los diputados del Congreso del Estado en turno consiguió más que presunción histórica dar voz al arte, a la ciencia, y por supuesto a la literatura a través de los libros.
Con ello buscamos como ayer, como hoy, mañana/ cosecha de frutos opimos en vida temprana (Profr. Fulgencio Vargas dixit). Así pues, la letra que leerán conlleva el acento circunflejo del leonés corazón asimismo retoma el motivo central del Himno de las bibliotecas proletarias (1939) con letra de Rafael Alberti y música de Vicente Salas Viu: sueño social e ilustrado de un grupo de hombres, que, como nosotros, buscamos el Bienestar social para todos.
Dicho sea de paso, las bibliotecas públicas en León están reducidas casi a polvo, no solo por la pandemia de Covid-19 sino por el descuido de las últimas tres administraciones públicas: 2012 a la fecha. Sus libros han sido echados al kilo de papel en pro de la renovación tecnológica. Sueño acariciado desde hace una veintena de años cuando aquella Administración pretendió salir del pacto federal y convertirlas en Centros del Saber. Ahora solo queda la nostalgia del tercer gran momento bibliotecario que vivieron en su historia, entre 2009-2012, cuando se pensó en sostener el proyecto de bibliotecas híbridas. En fin. Así la historia que no se quiere ver ni mucho menos hacer crónica.
Himno de las bibliotecas públicas
Cantar de la primavera obrera
Levanten la mano, piqueros,
lo mismo aquel trabajador
del cuero, del campo e hilados
nuestro gabinete público llegó.
Los libros se abren sinuosos
formemos al pueblo ¡sí señor!
que la lucha apenas comienza
¡viva! ¡viva! Esta revolución.
Todos juntos a todos enseñamos
niños, jóvenes, adultos, abuelos,
el más perfecto de los sonidos humanos,
con la literatura nos ensalzamos.
Este cantar de primavera obrera
hace historia desde mi León,
porque aquí ¡sí nos educamos!
en beneficio de nuestra gran Nación.
En tierra adentro, bajo el signo del Bajío,
con este cielo muy mediterráneo
con Lebrija y Cervantes tan ufanos
celebremos este himno proletario.
Cantemos gozosos hermanos
en pro de la libre Educación
pues con los bibliotecarios
abrocharemos este mal bien común.
Con la luz de León en sus libros
esta historia sí que prosperó,
ya lo dijo el poeta más leonérrimo:
con amor bendecimos
tu amor de patria perla...
Levanten la mano, piqueros,
lo mismo aquel trabajador
del cuero, del campo e hilados
nuestro gabinete público llegó.
Música: Juan Antonio Hernández
Letra: Juancarlos Porras y Manrique.
* POETA LEONÉS. EDITOR FUNDADOR DE GRUPO OCHOCIENTOS Y ACTUAL DIRECTOR DEL CENTRO DE INVESTIGACIÓN Y ESTUDIOS
LITERARIOS DE LEÓN (CIEL-LEÓN)