Santos Laguna no encontró oposición anoche en el TSM en su triunfo sobre Toluca por goleada de 4 a 0. Los Diablos Rojos confirmaron lo que habíamos visto en sus últimos seis juegos, son la peor versión del cuadro escarlata en los últimos nueve años.
El equipo que dirigió anoche Hernán Cristante está años luz del férreo rival que enfrentaron los Guerreros hace apenas nueva meses en la final del torneo Clausura 2018.
Esas condiciones de debilidad del oponente las aprovechó perfectamente la ofensiva lagunera. Apenas a los cuatro minutos, Diego Valdés cobró un tiro libre, al cual se lanzó tarde Alfredo Talavera, y los albiverdes tenían ventaja en el marcador, así sin más.
Apenas al minuto 20, Gerardo Arteaga pelea por un balón en zona defensiva por el sector izquierdo, la pelota llegó a Ayrton Preciado quien tira una especie de pared con Julio Furch, el ecuatoriano corrió 35 metros al área visitante para sacar un disparo cruzado, el cual, le hizo el “puente trágico” a Talavera para el segundo gol.
Al 32’ apareció el VAR para expulsar a Santiago García por una plancha sobre Arteaga y ahí estaba sentenciado el juego. El infierno ardió más para Toluca con la falta que le cometió Adrián Mora a Julio Furch y que anotó Javier Correa.
El desplome del Diablo llegó cuando al inicio del segundo tiempo Rodrigo Salinas intentó darle una pelota a Talavera con la cabeza, pero el testarazo fue débil y Valdés aprovechó para marcar su segundo gol del partido.
Así de simple fue el triunfo. Santos se embolsó tres puntos y dejó al rival tambaleando. El estado de gracia en pleno y los balones que antes no entraban ahora son goles repartidos entre los ofensivos.
Lo que hace 15 días eran abucheos y gritos de ¡fuera ‘Chava’ Reyes!, ahora fueron aplausos para el equipo santista. El resultado dicta la norma. Fue una semana de ensueño, tres victorias, dos goleadas incluidas, 12 anotaciones a favor y 3 en contra. Un paseo por el infierno. León será otra cosa.