Cada generación de aficionados puede asegurar que ha visto al mejor de todos los tiempos en sus respectivos deportes, si no existiera este eterno debate, nuestras pasiones no tendrían el mismo sabor.
Por si no fuéramos lo suficientemente afortunados de transitar en la misma época de talentos como Leo Messi, Serena Williams, Roger Federer, Rafael Nadal, Novak Djokovic, Michael Phelps y Tom Brady, también hemos tenido la fortuna de ver a Michael Jordan y disfrutar de los nuevos récords de LeBron James.
Lo que vimos esta semana fue historia pura. El chico de Akron no ha hecho más que cumplir y superar todas las expectativas que se pusieron sobre él cuando aún era un adolescente. Ahora es el máximo anotador en la historia de la NBA, superando los 38,387 puntos de otro histórico como Kareem Abdul-Jabbar y las posturas encontradas sobre el mejor de todos los tiempos frente a Jordan están a la orden del día.
Es verdad que Kareem, quien mantuvo el reinado por 34 años no estaba del todo en la conversación, pero esta marca no se trata del único récord envidiable que posee el actual jugador de los Lakers.
También es verdad que gracias a la modernización del juego, la creación de los triples, tecnología en el calzado y mejores tendencias en la salud física y mental de los jugadores, LeBron tuvo un camino favorecedor, pero eso no le quita la dedicación y un poco de suerte que hay que tener para ir por los 40 mil puntos a sus 38 años.
A su favor está también la más espectacular actuación que se ha visto en unas Finales. En 2016 junto a los Cavaliers remontó la serie que iba abajo 3-1 ante los Warriors y de paso le quitó la temporada de ensueño de 73 victorias a la dinastía de Golden State.
Lideró en puntos, rebotes, asistencias, bloqueos y robos durante los siete juegos, incluyendo deleitarse con un triple doble en el último. Sin embargo cuando de campeonatos se trata, los seis de Jordan con los Bulls y un retiro en medio no tienen igual ante los cuatro de LeBron en 10 finales disputadas.
Siempre existirán los comentarios sobre cómo hoy en día Michael anotaría mucho más y promediaría 40 puntos por noche, pero también nos tratamos de imaginar el desempeño de James hace más de dos décadas. Para mí ambos tienen válidos argumentos, pero en cuestión de apreciación personal, Michael Jordan sigue siendo difícil de superar.
Jimena Rodríguez
Twitter: @jiimejime