Ante la oportuna alerta de la reportera Dora Irene Rivera, a las 03:30 de este jueves la prensa de Notivox Monterrey se detuvo para insertar en la portada y en la página 8 la noticia que se generaba esa misma madrugada: la prisión preventiva por 30 días dictada al ex gobernador Rodrigo Medina.
De acuerdo con los argumentos del juez de control que lleva la carpeta judicial del ex mandatario por el caso Kia, se buscaba evitar que el vinculado a proceso se sustrajera de la acción de la justicia, ante las acusaciones de daño al patrimonio de Nuevo León por más de tres mil 600 millones de pesos.
Tampoco se trata de hacer un análisis de un juicio, sino de poner sobre la mesa los antecedentes de que el encarcelamiento de Rodrigo Medina ha sido vendido políticamente por el gobernador Jaime Rodríguez como uno de sus principales objetivos, antes y después de llegar al poder.
El encargado de las investigaciones es el subprocurador Anticorrupción, Ernesto Canales Santos, quien hasta el momento ha dado más escándalos personales que resultados jurídicos.
Si por la mañana muchos nuevoleoneses comentaban en redes sociales que el gobernador Jaime Rodríguez había cumplido una de sus principales promesas de campaña, por la noche, otros muchos decepcionados calificaban los hechos de puro show.
Con la rápida liberación del ex mandatario, Ernesto Canales tiene ante sí otra derrota legal, porque horas después del encarcelamiento preventivo de Medina, el subprocurador se apresuró a justificar la decisión del juez de control, que se antojaba endeble.
Mientras ex mandatarios priistas como Javier Duarte andan prófugos de la justicia, a Rodrigo Medina, que ha enfrentado todas las imputaciones y lo cuidan escoltas del Gobierno Estatal, lo meten a la cárcel sin ser vencido en un juicio.
El tema de fondo no es la culpabilidad o inocencia de Medina, que se definirá al final de los juicios que le siguen, sino el utilizar los asuntos judiciales para hacer campañas políticas.
Corrupción, mentiras y show alimentan la política… y desalientan al ciudadano.